Filas de Merkel se reúnen en Berlín tras el desafío electoral de Steinmeier

Berlín.-  Las cúpulas de la Unión Cristianodemócrata (CDU) de Angela Merkel y la Unión Socialcristiana de Baviera (CSU) se reunieron hoy en la Cancillería alemana, tras el reto lanzado por el candidato socialdemócrata y ministro de Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, de que se impondrá en las próximas elecciones generales.

El propósito de la CDU/CSU es ultimar las cuestiones aún pendientes de su programa electoral conjunto, después de que hoy el Partido Socialdemócrata (SPD) ratificase el suyo en un congreso extraordinario celebrado en Berlín.

Steinmeier, que fue designado hace ocho meses candidato del SPD a la Cancillería en las generales del 27 de septiembre, fue aclamado este domingo por sus filas, tras un encendido discurso en que llamó a luchar por recuperar el centro político de Alemania.

Pese a la derrota socialdemócrata en los recientes comicios europeos, con un histórico récord a la baja del 20,8 por ciento, y con los sondeos en contra, Steinmeier se declaró convencido de la victoria en las elecciones legislativas.

"Queremos y vamos a ganar el 27 de septiembre", aseguró Steinmeier, tras admitir su decepción por los resultados de las europeas, hace una semana, y recordar que en las anteriores legislativas de 2002 y 2005 su partido logró remontar posiciones y quedar igualado a la CDU/CSU, pese a los sondeos adversos iniciales.

"Fue un mal domingo, una porquería", dijo, pero "una cosa son las europeas y otra las elecciones al Bundestag (Parlamento)", añadió, para sentenciar: "la carrera está abierta y vamos a ganarla".

Steinmeier recalcó que el SPD tiene ya su programa, mientras que la CDU/CSU aún no lo ha presentado, lo que refuerza, según él, que llegó la hora de demostrar "quién tiene capacidad de liderazgo y quién se limita a moderar ante la crisis".

El programa del SPD fue aprobado en abril por la presidencia y pone el acento en lo social, el impulso a la educación y la familia.

De ganar, el SPD promete un descenso del tipo mínimo del IRPF del actual 14 al 10 por ciento y un incremento del máximo del 45 al 47 por ciento.

El ala izquierda había reclamado un perfil más social, pero se ha doblado ante la evidencia de que se impone cerrar filas.

Del programa de las filas de Merkel sólo ha trascendido, hasta ahora, que también habrá promesas de reducción de la presión fiscal en la próxima legislatura, pero sin concretarse aún su alcance y calendario.