La industria andaluza emitió el año pasado un 8% más de CO2 que el asignado

Sevilla.-  Las 182 industrias andaluzas cuyas emisiones de CO2 están reguladas emitieron el año pasado un 8 por ciento más de lo asignado a pesar de que redujeron sus vertidos a la atmósfera un 19 por ciento con respecto al año anterior.

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(EFE)

La secretaria general de Cambio Climático y Calidad Ambiental de la Junta de Andalucía, Esperanza Caro, ha contrapuesto hoy el coste que afronta el sector eléctrico andaluz por su exceso de emisiones de CO2 con otros segmentos industriales, como el cerámico, cuyo déficit de emisiones se ha convertido en una importante fuente de ingresos que lo ha revitalizado. EFE/archivo

Estas industrias emitieron el año pasado 27,23 millones de toneladas de CO2, un 19 por ciento menos que los 33,44 millones de 2007 pero un 8,8 por ciento más que los 25 millones de toneladas asignadas, según datos facilitados hoy por la Consejería andaluza de Medio Ambiente.

Las industrias andaluzas emitieron al año pasado 7,21 millones de toneladas de CO2 menos que en 2007, en gran medida gracias a que el sector de generación de energía eléctrica emitió 5,68 millones de toneladas de CO2 menos.

Aunque las emisiones totales fueron las menores de los últimos cuatro años, rebasaron en 2,2 millones de toneladas a las asignadas, el mayor desfase de los últimos cuatro ejercicios, que se explica porque las asignaciones de emisiones de CO2 para 2008 se redujeron un 24 por ciento respecto a las de 2007, por el recorte anual derivado de los compromisos del Protocolo de Kioto.

Esta progresiva reducción anual de derechos de emisión también explica que el déficit entre las emisiones y las asignaciones aumentase desde las 559.901 toneladas de 2007 a los 2,2 millones de 2008.

La compensación de este desfase con la compra de derechos de emisión le costará 24 millones de euros a las empresas afectadas, dado que el precio de la tonelada de CO2 cotiza en los mercados internacionales a 11 euros.

El sector de generación eléctrica sigue siendo el que más rebasa sus emisiones asignadas pues en 2008 vertió a la atmósfera 14,73 millones de toneladas de CO2, 4,6 millones más de las inicialmente asignadas.

Y ello, pese a que sus emisiones durante el año pasado fueron las menores desde 2005 e inferiores en un 28 por ciento a las de 2007 porque dos de las tres grandes plantas que consumen carbón -más contaminantes y menos eficientes que las que queman gas natural- pararon durante casi todo 2008 para someterse a reformas para reducir sus emisiones contaminantes.

La secretaria general de Cambio Climático y Calidad Ambiental de la Junta de Andalucía, Esperanza Caro, ha contrapuesto hoy el coste que afronta el sector eléctrico andaluz por su exceso de emisiones de CO2 con otros segmentos industriales, como el cerámico, cuyo déficit de emisiones se ha convertido en una importante fuente de ingresos que lo ha revitalizado.

Caro ha explicado a EFE que los derechos asignados a los sectores industriales andaluces se ajustan a sus emisiones reales excepto en el caso del eléctrico, que en los últimos años ha afrontado incrementos de la demanda con recortes de sus asignaciones de CO2.

Los últimos indicadores que apuntan a un descenso del consumo eléctrico en los últimos meses permitirán ajustar este año el desfase entre las asignaciones y las emisiones de CO2 de este sector, que emite más de la mitad de todas las emisiones de la industria andaluza.

Caro ha enfatizado que la penalización por el exceso de emisiones de CO2 refuerza los beneficios de las energías renovables no sólo para el medioambiente y la salud sino también por criterios estrictamente económicos.

"Las energías renovables, y en especial, las fotovoltáicas son el oro intangible de Andalucía", ha apostillado.

En su opinión, la reducción en un 19 por ciento de las emisiones de CO2 de la industria andaluza en 2008 no se debió tanto a la crisis, pues la actividad industrial se mantuvo o incluso aumentó en casi todos los sectores, como a la mayor eficiencia ambiental.

Para Caro, en 2009 habrá una sensible reducción de las emisiones de CO2 porque al impacto de la crisis industrial se sumará la mayor actividad de las energías renovables, que suponen ya un 30 por ciento de la generación eléctrica andaluza, y la mejor eficiencia ambiental de la industria.

Frente al descenso del 28 por ciento de las emisiones de CO2 del sector de generación de energía eléctrica durante el año pasado, el de refino de petróleo aumentó sus emisiones un 2 por ciento.

El sector cementero emitió 4,25 millones de toneladas de CO2, un 5 por ciento menos que en 2007, mientras que el cerámico sólo emitió 625.947 toneladas, un 39 por ciento menos, por el cierre de instalaciones y la caída de la construcción.