José Tomás y "Morante de la Puebla", dos poéticas taurinas

Madrid.-  Este domingo, el ruedo de la gaditana plaza de toros de El Puerto de Santa María será testigo de excepción del mano a mano entre dos figuras del toreo, José Tomás y José Antonio "Morante de la Puebla", dos hombres que viven en el ruedo dos poéticas taurinas diferentes, pero con idéntica pasión.

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(EFE)

El diestro José Tomás da la vuelta al ruedo con la oreja que le cortó a su primer morlaco, durante el festejo que abre la Feria de la Peregrina de Pontevedra.

Uno es poco mayor que el otro, pues José Tomás Román vino al mundo el 20 de agosto de 1975 en Madrid, aunque se ha criado en el madrileño y serrano pueblo de Galapagar, y José Antonio Morante Camacho nació el 2 de octubre de 1979 en La Puebla del Río (Sevilla), a orillas del Guadalquivir.

Y mientras uno decidió mantener su mismo nombre en los carteles, el otro le añadió su lugar de origen. Sin embargo, ambos están igual de orgullosos de donde proceden. De hecho, José Tomás fue nombrado Hijo Predilecto de Galapagar el pasado mes de julio.

Ya de niños, uno prefería el fútbol y se hacía seguidor del Atlético de Madrid, mientras que otro, cuando aún casi balbuceaba, ya quería ser torero, tal y como escribe "Morante de la Puebla" en su página web: "Recuerdo dormirme de niño con la ilusión de los Reyes Magos, no quería ningún juguete, sólo una muleta y una espada".

José Tomás, al que su abuelo Celestino empujó hacia los toros, tuvo clara su profesión tras matar a su primera becerra con doce años en Colmenarejo (Madrid), mientras que "Morante de la Puebla" se encaminó él sólo hacia el mundo de los toros; fue en las marismas del Guadalquivir y, según él, toreó su primera becerra "con menos edad que cuerpo".

Los toros se fueron metiendo en la sangre de ambos críos y José Tomás debutó como novillero con caballos en 1993 en Benidorm (Alicante); "Morante de la Puebla" debutó con caballos en Guillena (Sevilla).

Desde sus comienzos, José Tomás tuvo claro que no quería pagar para torear y decidió viajar a México en 1993. Tras presentarse en Madrid dos años después y abrir la Puerta Grande de Las Ventas, volvió a América y tomó la alternativa como matador de toros a los 20 años, el 10 de diciembre de 1995, en la Monumental Plaza de México, con Jorge Gutiérrez como padrino y Manolo Mejía como testigo.

"Morante de la Puebla" tomó la alternativa con 18 años en Burgos, el 29 de julio de 1997, con Fernando Cepeda como padrino y César Rincón como testigo ante astados de Juan Pedro Domecq.

A Las Ventas, la plaza más importante del mundo, José Tomás llegó antes que su compañero del próximo 10 de agosto, pues confirmó la alternativa en Madrid el 14 de mayo de 1996 junto a José Ortega Cano y Jesús Janeiro "Jesulín de Ubrique".

"Morante de la Puebla" entró en Madrid el 24 de mayo de 2001 junto a los diestros Curro Vázquez y Vicente Barrera.

Los éxitos se suceden desde entonces para ambos diestros hasta que, para gran pesar de "tomasistas" y "morantistas", deciden, sin dar explicaciones, apartarse de los ruedos.

José Tomás toreó el 16 de septiembre de 2002 en Murcia la que sería su última corrida hasta 2007, y "Morante de la Puebla" lo decide en 2004 tras matar seis toros en solitario en Las Ventas. Él regresaría antes que el de Galapagar, sólo un año después, pero en 2007 volvió a irse de los ruedos hasta que reapareció el pasado 28 de febrero en Vistalegre (Madrid).

Pero los dos coinciden en un resurgir apoteósico.