Kubica se doctora en el 'gran circo' en el circuito en el que volvió a nacer

MADRID.-  El polaco Robert Kubica (BMW-Sauber) logró la primera victoria de su carrera en un accidentado Gran Premio de Canadá, disputado sobre el trazado del circuito Guilles Villeneuve de Montreal, que dejó un nuevo abandono de Fernando Alonso (Renault), tras realizar un trompo a falta de 25 vueltas para el final cuando contaba con claras opciones de podio.

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Reuters (EUROPA PRESS)

El polaco Robert Kubica (BMW-Sauber) logró la primera victoria de su carrera en un accidentado Gran Premio de Canadá, disputado sobre el trazado del circuito Guilles Villeneuve de Montreal, que dejó un nuevo abandono de Fernando Alonso (Renault), tras realizar un trompo a falta de 25 vueltas para el final cuando contaba con claras opciones de podio.

La retirada del asturiano no fue el único contratiempo vivido en el bacheado asfalto canadiense y es que un accidente en el 'pit lane', después de la salida del 'safety car', acabó con la carrera de Lewis Hamilton (McLaren-Mercedes), que lideraba en ese momento la prueba, y de Kimi Raikkonen (Ferrari), que marchaba tercero.

El destino quiso que en el mismo circuito en el que la pasada temporada sufriera ese terrible accidente que heló la sangre de todos los espectadores y del que salió ileso, lograra Kubica su primer triunfo y la primera victoria de un piloto polaco, que además le vale para seguir haciendo historia y liderar el campeonato del mundo, con cuatro puntos de ventaja respecto a Hamilton y a Massa.

Y es que parece que el trazado de la isla artificial de Notre Dame confirma cada año a una nueva figura de la Fórmula 1. Lo que en esta ocasión aconteció con Kubica, que no obstante ya había avisado de su peligro con dos segundos puestos en esta temporada, ocurrió también en la pasada edición con la primera 'pole' y primer triunfo en su carrera del británico Lewis Hamilton.

Asimismo, el primer puesto del polaco significa además la primera victoria para la escudería suizo-alemana, que lo celebró por partida doble con el histórico doblete que completó el otro integrante del equipo, el alemán Nick Heidfeld (BMW-Sauber).

UN TROMPO ACABA CON LAS ILUSIONES DE ALONSO

El que también vio cerca durante varias vueltas su presencia en un escalón en el podio canadiense fue Fernando Alonso, que a falta de 25 giros marchaba octavo, pero virtual tercero, pues el asturiano ya había realizado su segundo repostaje.

El bicampeón del mundo, que perdió una plaza en la salida en beneficio del alemán Nico Rosberg (Williams), vivía una encarnizada lucha con Heidfeld, más cargado al apostar por una estrategia de una parada, por el segundo puesto. La enésima batalla entre ambos pilotos acabó con la ilusión de Alonso, que arriesgó y trompeó, mandando al traste el que hubiera sido su cajón número 50.

"Arriesgué porque sabía que era fundamental adelantar a Heidfeld, que iba a sólo una parada. Cogí la parte sucia y me salí. Fue un error demasiado grande", explicó tras su abandono Alonso, que volvió a demostrar que el Guilles Villeneuve no se le da excesivamente bien -ganó en 2006, pero se retiró en 2004 y 2005-.

HAMILTON ARROLLA A RAIKKONEN EN EL 'PIL LANE'

Sin embargo, lo más espectacular que se vivió en esta séptima prueba del Mundial fue el accidente protagonizado por los dos máximos favoritos para hacerse con el título. En la vuelta 18, el coche de Adrian Sutil (Force India) se paró y de sus neumáticos comenzó a salir fuego, lo que hizo necesaria la salida del 'safety car'.

Los grandes gallos del 'paddock' estaban sin combustible y en cuanto se abrió el 'pit lane' entraron todos en tromba a realizar su primer repostaje. A la salida, Raikkonen y Kubica habían ganado la posición a Hamilton, pero el semáforo aún estaba en rojo, con lo que ambos frenaron bruscamente. El británico, que venía por detrás, embistió al de Ferrari y tiró por tierra las opciones de victoria de ambos.

Por detrás, Rosberg, que marchaba cuarto, también perdió su alerón al chocar contra Hamilton, que no sufría una retirada desde la carrera de China de la pasada campaña, y tuvo que pasar por 'boxes' para efectuar un nuevo repostaje. Los grandes afortunados fueron Kubica y Alonso, que también realizaban su parada, pero que pudieron evitar el accidente.

Esta situación dio un vuelco a la carrera, que pasó a encabezar Heidfeld, seguido de Barichello y Nakajima, sin duda un trío totalmente inesperado. Después, todo fue volviendo poco a poco a su sitio y tras los respectivos repostajes de todos, Kubica se llevó la victoria seguido de Heidfeld y del británico David Coulthard (Red Bull), que consiguió aquí el podio número 62 en su carrera tras el logrado por última vez en Mónaco 2006.

Por su parte, el otro piloto del 'Cavallino Rampante', Felipe Massa, terminó quinto, sólo una posición más que la sexta plaza desde la que partía, y es que el brasileño también se vio perjudicado por el accidente de su compañero y por su mala adapatación al complicado asfalto canadiense.