Ausencia dirigentes históricos marcarán celebración 30 aniversario sandinismo

Managua.-  El gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) celebra mañana el 30 aniversario de la acción armada que el 19 de julio de 1979 derrocó a la dictadura de Anastasio Somoza, con un acto al que no asistirá gran parte de los dirigentes históricos.

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(EFE)

"Solo asistiré a los aniversarios de la revolución cuando verdaderamente el sandinismo esté unido", declaró hoy a la prensa Carlos Mejía Godoy, compositor e intérprete de canciones alusivas a las acciones de los sandinistas. EFE/Archivo

Varios de los más conocidos líderes del movimiento sandinista que triunfó hace 30 años no estarán el domingo en la tarima de la Plaza de la Fe de Managua, donde se recordará el gran esfuerzo armado para desalojar del poder a Somoza, según han anunciado ellos mismos y la prensa local.

Entre los grandes ausentes, por no haber sido invitados, figuran el ex jefe del ejército Joaquín Cuadra Lacayo, alejado de la política y quien participó en una acción armada para liberar entre otros a Daniel Ortega, cuando llevaba siete años y un mes como prisionero de Somoza.

"Solo asistiré a los aniversarios de la revolución cuando verdaderamente el sandinismo esté unido", declaró hoy a la prensa Carlos Mejía Godoy, compositor e intérprete de canciones alusivas a las acciones de los sandinistas.

Otros ausentes serán el ex alcalde de Managua Dionisio Marenco, la ex comandante Dora María Télez, que tuvo una destacada participación en el asalto al Palacio Nacional de Managua en 1978, y la ex comandante Mónima Baltodano, que lidera el disidente Movimiento por el Rescate al Sandinismo.

Los antiguos comandantes de la revolución y hoy sandinistas disidentes Víctor Tirado, Henry Ruiz y Luis Carríon tampoco acudirán al acto, como tampoco lo hará Jaime Wheelock, ex ministro de Reforma Agraria en la década de 1980.

La portavoz gubernamental y primera dama de Nicaragua, Rosario Murillo, todavía no ha divulgado el programa oficial elaborado para conmemorar la efemérides en la periferia norte, junto al Lago Xolotlán de Managua, en la plaza más grande de esta capital.

Por ello, no se conoce qué presidentes, personalidades y delegados especiales asistirán a esta celebración, encabezada por el gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), que lidera el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega.

En años pasados, a estas fiestas sandinistas han asistido decenas de delegados de diversos países.

Las movilizaciones de los sandinistas en todo el país, para llenar la plaza, han comenzado hoy con vigilias y otras actividades con el objetivo de que los seguidores de Ortega lleguen a Managua desde el interior de Nicaragua en las primeras horas de mañana.

Según se ha adelantado, el programa oficial arrancará hacia las 11.00 hora local (17.00 GMT).

Está previsto que entre las personalidades que estarán en la tarima especial, que todavía se continua acondicionando, figuren la senadora colombiana Piedad Córdoba, mediadora ante las FARC para la liberación de los rehenes, la premio nobel de la paz 1992, Rigoberta Menchú, y el presidente de la Asamblea General de la ONU, Miguel D'Escoto.

Por su parte, el coordinador del Movimiento de Renovación Sandinista (MRS), Edmundo Jarquín, en el habitual escrito semanal que difunde por una emisora local, afirmó que "hoy Nicaragua está profundamente dividida, polarizada y enconada".

"Aquella gran unidad nacional que se gestó contra el somocismo ya no existe. Y (Daniel Ortega) no debería olvidar que la inmensa mayoría de la dirigencia del FSLN de 1979 no estará mañana a su lado. Esa prueba del liderazgo, la capacidad de unir, Ortega no la pasa", enfatizó el líder sandinista disidente.

"No la pasa nacionalmente, y tampoco internacionalmente. En 1979 toda la comunidad internacional arropó a la Revolución Sandinista. Eso no duró porque la Nicaragua revolucionaria tomó un radical alineamiento geopolítico durante la guerra fría", agregó.

Señaló que tras dos años y medio de Gobierno, Ortega tiene actualmente dividida a la comunidad internacional, y Nicaragua ha perdido recursos de cooperación que tanto necesita.