Juanes cree que "ningún español de bien" discute que se sepa el lugar de los enterramientos

Alicante.-  El presidente de la Audiencia Nacional (AN), Ángel de Juanes, ha considerado hoy que "ningún español de bien" puede discutir el derecho a restablecer la dignidad de las personas que sufrieron la violencia durante la Guerra Civil y a que sus familias conozcan el lugar donde fueron enterrados.

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(EFE)

El presidente de la Audiencia Nacional, Ángel de Juanes, durante su ponencia hoy "La Ley de la Memoria Histórica", en el marco del curso de verano de la Universidad de Alicante "El drama final de la Guerra Civil Española".

De Juanes ha hecho estas declaraciones minutos antes de ofrecer una conferencia en la Universidad de Alicante sobre la aplicación que la Sala Quinta del Tribunal Supremo, de la que formó parte, hace del recurso de revisión en relación a la Ley para la Recuperación de la Memoria Histórica.

El presidente ha subrayado que "todas las personas tienen derecho a su memoria histórica y a la recuperación de su dignidad", uno de los objetivos fundamentales de la Ley aprobada en 2006.

También que sus familiares tienen "derecho absolutamente a realmente saber dónde están (sus allegados) y a dar el enterramiento que consideren más oportuno".

Aunque ha evitado valorar el contenido de la Ley ya que prefiere dejar ese trabajo "a los historiadores", el presidente de la Audiencia Nacional ha aclarado que no se trata de una ley sectaria ya que se refiere "a todos los que hubieran sido objeto de violencia, incluso por motivos religiosos".

Ha recordado que es una ley nacida fruto del consenso y de "un esfuerzo en no reabrir heridas", por lo que se buscó una "solución intermedia".

Ha proseguido que esto provoca que unos sectores la califiquen "de insuficiente y otros que mantengan que no había necesidad de la Ley" ya que "siempre que se llega a un punto intermedio, hay insatisfacciones por una u otra parte".

En todo caso, ha opinado que la Ley ha alcanzado el objetivo de recobrar la memoria histórica y de "no abrir heridas sino que debe contribuir a que se cierren".

"La ley no está hecha contra nadie. Se trata de cerrar un periodo de la historia y con los menos daños colaterales que se puedan", ha insistido.

En cuanto al objeto de su visita a los cursos de verano de la Universidad de Alicante, De Juanes ha explicado a medio centenar de alumnos de Derecho que antes de ser presidente de la Audiencia Nacional era magistrado de la Sala Quinta del Supremo, que es el encargado de tratar los recursos de revisión en torno a la Ley de Memoria Histórica.

Ha relatado varios de los casos tratados por el Supremo, entre ellos uno en el que la mayoría conservadora la Sala acordó no pronunciarse sobre un recurso de los familiares de un capitán del Ejército fusilado sin juicio previo alguno en 1936, bajo el argumento de que sólo se puede apelar contra sentencias firmes y aquello no reunió los mínimos requisitos de un juicio.

De Juanes, de tendencia progresista, ha relatado que él y otro magistrado emitieron un voto particular porque cree que el Supremo sí debía satisfacer a la familia porque aquella ejecución (decidida en una reunión por catorce superiores militares) tuvo una "cierta" apariencia de juicio, aunque sin las más mínimas garantías procesales.

Ha señalado que todos estos procesos militares ilegítimos, así como los llamados tribunales de responsabilidad política, de la masonería o de orden público son susceptibles de ser revisados mediante el recurso de revisión, el cual debería ser sometido a "ciertos retoques".

Todo ello para lograr el fin de la Ley de Memoria Histórica de satisfacer a aquellos que "padecieron la persecución o violencia de la Guerra Civil y la Dictadura".

De Juanes ha dado la ponencia dentro del curso de verano de la Universidad de Alicante titulado "El drama final de la Guerra Civil Española", y ha aclarado que su inclusión como conferenciante fue acordada antes de que fuera elegido presidente de la Audiencia Nacional, nombramiento ocurrido el pasado marzo, concretamente cuando era magistrado de la citada Sala Quinta del Supremo.