Las medidas que ya reactivan el sector del coche en España las firma Merkel

Angela Merkel es una de las esperanzas de muchos trabajadores de Villamuriel de Cerrato (Palencia) para salir de esta crisis. ¿Cómo es posible? El gobierno alemán ha puesto en marcha un programa de ayudas directas para la compra de un automóvil —similar al que anunció Zapatero en el debate— que ha conseguido que muchos alemanes se animen a comprar un coche nuevo. Y resulta que una parte importante de esos coches se fabrica en España y algunos de ellos en Villamuriel de Cerrato. Conclusión: los 2.500 euros de Merkel ayudan a reactivar el maltratado sector del automóvil español.

(REUTERS)

Merkel pisó el acelerador del sector alemán, y eso dio velocidad a las empresas en España.

Hace casi dos meses que la fábrica de Villamuriel tuvo que suprimir el turno de noche porque no había pedidos suficientes. 400 trabajadores se fueron a la calle, todos eventuales a los que no se les renovó el contrato. Pero a partir del 15 de junio el turno nocturno va a volver a ponerse en marcha y, aunque no lo haga a todo gas —de momento sólo se va a producir la mitad que antes que el cierre—, la noticia permite ser un poco optimista, después de muchos meses en los que la industria del automóvil no levanta cabeza. "Ha habido nuevos pedidos y ahora en la fábrica no se da abasto con el personal que hay, por eso ya se ha empezado a llamar a parte de la gente a la que echaron cuando quitaron el turno de noche", cuenta Ignacio Ruiz, de CCOO en Palencia.

El caso de Villamuriel no es el único. "Las ayudas directas que se están dando en Alemania, Francia, Italia y Reino Unido, por ejemplo, han tenido un efecto motor en España y se han vuelto a lanzar los pedidos. Algunas empresas que estaban inmersas en expedientes de regulación temporales han vuelto a abrir turnos y otras que pensaban plantearlos lo han parado por el momento", explica Máximo Blanco, responsable de Política Industrial de la Federación de Industria de CCOO.

Y es que, además de las medidas que se pongan en marcha desde la Administración española, buena parte de la recuperación del sector pasa por lo que ocurra en el exterior, sobre todo en la Unión Europea. El 85% de los automóviles que se fabrican en España se exportan, según los datos de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC). Y el mercado europeo es el principal destino. Por eso, que la venta de vehículos aumentara en marzo un 40% en Alemania tiene un efecto directo sobre las fábricas españolas.

"Aún es pronto para poder cuantificar cómo estas medidas han incrementado los pedidos o cuánta gente ha vuelto a trabajar. Los primeros datos se sabrán dentro de un mes aproximadamente pero mucha gente que ahora estaba parada en casa por expedientes temporales podrá volver a su puesto", dice Máximo Blanco.

Después del golpe mortal que la crisis ha dado al sector de la construcción, la industria ha sido la que más ha sufrido sus consecuencias y, en especial, la del automóvil. El número de ERE se ha multiplicado por 16 en el primer trimestre del año respecto a 2008 —ha pasado de afectar a 11.375 personas a 180.579— y la mayor parte de ellos (148.100) pertenecen a la industria. En el sector del automóvil se han convertido en un proceso habitual: Seat en Martorell, Renault en Valladolid y Palencia, Nissan en Barcelona, Ford en Almussafes (Valencia)...

"Y lo peor no son las fábricas de automóviles sino las empresas de componentes y toda la industria que lo rodea", recuerda Blanco. "Se han perdido todos los empleos temporales y estamos hablando de unas 37.000 personas. Ellos también están recibiendo más pedidos del extranjero y, aunque no se puede hablar de recuperación ni de estabilización, sí que parece que significa que la situación empieza a repuntar. Ya hemos tocado fondo, así que no nos queda otra".

La propuesta de Zapatero tiene aún muchos aspectos por aclarar pero, en principio, consistirá en una ayuda de 2.000 euros por vehículo financiado por el Ejecutivo central (500 euros), las comunidades autónomas (500 euros) y los fabricantes (1.000 euros). "Lo importante de esto es cómo va a ayudar a la distribución y al comercio, no tanto a la fabricación porque los coches que se consumen en España son de importación".