Dos de cada tres padres de alumnos son partidarios del cheque escolar

Barcelona.-  Dos de cada tres padres de escolares son partidarios en España del llamado cheque escolar, entendido como una cantidad fija que el Estado otorgaría a todos los progenitores para pagar la educación del niño y que podrían gastarse donde quisieran, según una encuesta sobre la educación y la familia.

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(EFE)

Dos de cada tres padres de escolares son partidarios en España del llamado cheque escolar. EFE/Archivo

La encuesta, realizada en 2008 a 8.045 padres con niños de Primaria y ESO (Educación Secundaria Obligatoria), sirve de base para un estudio publicado por la Fundación de las Cajas de Ahorro que repasa diferentes cuestiones relacionadas con la educación.

Preguntados por cómo verían la introducción del cheque escolar, una medida que no se aplica en ninguna comunidad autónoma pero que ha sido defendida por partidos como CiU, el 68,8% se muestran partidarios, lo que supone 15 puntos más de los que eran favorables a ello en una encuesta del año 2000 (53,5%).

El estudio señala que la percepción favorable del cheque escolar experimenta una tendencia al alza, ya que en 1998 sólo el 47% de los padres era partidario de esta medida.

Frente al casi 69% favorable al cheque, el 18,1% de los encuestados ve muy mal (7,6%) o bastante mal (10,5%) su introducción.

Los autores del estudio aseguran que esta evolución es coherente con el cambio que también se ha detectado acerca de las preferencias por un sistema de enseñanza público o privado y apuntaría en la línea de una mayor presencia de la escuela privada.

Así, un tercio de los padres que tienen sus hijos en el sector público los llevarían, si pudieran, a colegios concertados o privados puros, mientras que cerca de la mitad de quienes los tienen matriculados en el sector privado o concertado los llevaría a un centro público.

Los autores del estudio aseguran que lo más interesante de este simulacro es ver lo que pasaría con la composición social del alumnado de unos y otros centros, y concluyen que "ocurriría que se reducirían las desigualdades de composición social entre, por una parte, los centros públicos y, por otra, los concertados y privados puros".

El estudio apunta que en los centros públicos acabarían pesando algo más las familias de estatus alto o medio-alto, y algo menos las de estatus bajo o medio-bajo. En los centros privados, por el contrario, pesaría algo menos el estatus alto o medio-alto, y algo más, el bajo o medio-bajo.

Respecto a la valoración que hacen los padres del nivel de exigencia del centro educativo al que asiste su hijo, el 45% lo consideran adecuado y el 46%, demasiado bajo, con sólo una mínima proporción que los considera demasiado alto (5%).

A los padres parece interesarles en especial la enseñanza de las Matemáticas y del Inglés, y menos otras asignaturas, lo que "contrasta con lo que se suele entender que son los resultados, no muy altos, de los alumnos en tales materias".

La mayoría de los padres (75%) complementan la escuela con actividades extraescolares con una dimensión educativa que incluyen, sobre todo, actividades deportivas y, en menor medida, la enseñanza de idiomas, además de los refuerzos de las asignaturas escolares, la informática y las actividades artísticas.

En relación con la dotación de recursos educativos en los hogares, ha bajado ligeramente el número de libros, mientras que ha aumentado la dotación de aparatos electrónicos de posible instrucción y entretenimiento, en particular los ordenadores (22% con ordenador con internet en 2000 y el 77% en 2008).

Los escolares con internet se pasan cerca de una hora cada día frente al ordenador, tiempo al que hay que sumar las 1,3 horas de televisión que se ve en todos los hogares y el uso diario o muy frecuente del Messenger y de la vídeoconsola de juegos por parte de una parte importante de los alumnos, (27% en el caso del Messenger y el 27% en el de la vídeoconsola).