El arzobispo electo recuerda que la Iglesia es una realidad visible en quienes sufren

Valladolid.-  El arzobispo electo de Toledo, Monseñor Braulio Rodríguez Plaza, ha recordado hoy desde Valladolid, durante su primera intervención como nuevo primado de España, que la Iglesia no sólo "es un misterio", sino también una "realidad visible" que tiene la cara de los más débiles y de cuantos sufren.

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(EFE)

El hasta ahora arzobispo de Valladolid, Braulio Rodríguez Plaza, nuevo prelado de la diócesis de Toledo, tras la rueda de prensa que ofreció hoy en Valladolid como nuevo primado de España.

A estos hermanos ha instado el nuevo arzobispo a cuidar y servir dentro de "esta aventura sorprendente", como ha denominado a la tarea eclesial que en breve iniciará con su entrada en la sede toledana, probablemente a partir del próximo 21 de junio, una semana después de la festividad del Corpus Christi.

"El amor de Cristo os impulsa a evangelizar, a cuidar de los más débiles, de cuantos están sufriendo y dan rostro a Cristo pobre y Siervo. Os pido hermanos, sobre todo a los presbíteros, que me ayudéis a serviros bien", ha solicitado monseñor Rodríguez durante la lectura del primer saludo dirigido a los fieles de Toledo.

Lo ha formulado desde el Palacio Arzobispal de Valladolid, cuya cátedra episcopal ha ocupado desde el 13 de 2002 hasta el día de hoy, en que ha sido informado de su nuevo destino por el Nuncio Apostólico del Papa en España, el portugués Manuel Monteiro de Castro.

El prelado ha agradecido al Papa Benedicto XVI la confianza depositada en su persona por este nombramiento, le ha felicitado por su octogésimo segundo cumpleaños y agradecido también el afecto y el magisterio de su antecesor en Toledo, monseñor Antonio Cañizares, que desde el pasado mes de diciembre es miembro de la curia vaticana.

Ha pedido a sus hermanos en la archidiócesis castellanomanchega "que comencéis ya a orar por mí, para que sea buen obispo, al frente de esa porción del Pueblo de Dios que es la Iglesia de Toledo", y ha expresado su "cercanía", en estos momentos, al histórico cardenal Marcelo González (1918-2004) por las enseñanzas de él recibidas y también al emérito de Toledo Francisco Álvarez Martínez.

Desde Valladolid ha saludado también a las autoridades autonómicas, provinciales y locales de Castilla-La Mancha, a la corporación municipal de Toledo, así como a su alcalde, Emiliano García-Page, "pues seré ciudadano y vecino de esta preciosa ciudad".

En otro mensaje dirigido a los fieles de Valladolid, cuyo arciprestazgo ha regido durante los últimos seis años y medio, ha pedido disculpa por los posibles errores que haya podido cometer, y agradecido la colaboración de sus vicarios y miembros de la curia, de quienes se ha despedido durante una reunión previa al anuncio oficial.

"Me cuesta dejaros: es la verdad, sin retórica", ha añadido monseñor Rodríguez, antes de hacer notar, a preguntas de los periodistas, las raíces toledanas de su familia materna cuando su abuelo Álvaro ejerció de cartero en el municipio de Fuensalida, donde nació su madre, quien a su vez lo trajo al mundo a él en la cercana población de Aldea del Fresno (Madrid), el 27 de enero de 1944.

El prelado ha expresado el trabajo que le cuesta cada vez que tiene que hacer la maleta, como ya le sucedió en la Diócesis de Osma-Soria (1987-1995) y en la de Salamanca (1995-2002), y restado importancia a su posible nombramiento como cardenal, del que han sido revestidos sus antecesores en Toledo.

"Es una decisión del Papa y algo que no me preocupa porque lo primero que voy a hacer cuando llegue a mi destino será ver, oír, callar, comprender y luego tomar decisiones", ha afirmado.

Entre las primeras felicitaciones ha recibido las del obispo de Lleida, de Cáritas-Toledo y de la Conferencia Episcopal a través de su secretario general, Juan Antonio Fernández Camino, también obispo auxiliar de Madrid.

Entre todas ha destacado la del Ayuntamiento de Fuensalida (Toledo), con la rúbrica de su alcalde, Víctor Manuel Fernández, el pueblo del que procede su familia materna.

"No he buscado este nombramiento ni he pedido que me cambiaran", ha concluido el arzobispo electo antes de anunciar, como fecha más probable de su toma de posesión, la del 21 de junio para evitar así la coincidencia con el Corpus (14 de junio), la entrada del nuevo obispo de Jerez (7 de junio) y poder despedirse de los fieles de Valladolid el próximo 31 de mayo, Domingo de Pentecostés.