Álava dice que es imposible planificar la asistencia a menores extranjeros

Vitoria.-  La responsable de Política Social y Servicios Sociales de la Diputación Foral de Álava, Covadonga Solaguren, ha insistido hoy que actualmente es "imposible" hacer una planificación de la asistencia a los menores extranjeros no acompañados, porque es "imposible prever cuántos van a llegar".

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(EFE)

Imagen de un menor extranjero. EFE/Archivo

Solaguren ha comparecido hoy a petición del PP en la Comisión correspondiente de las Juntas Generales de Álava para hablar de la situación actual de los servicios prestados a estos menores y del futuro nuevo centro de Molinuevo, sobre cuya apertura no ha ofrecido novedades.

Ha insistido en que para hacer una buena planificación asistencial se debe poner un cupo de menores por población de cada territorio o comunidad autónoma, se debe aprobar un protocolo unitario para la determinación de las edades de los menores y prohibir la movilidad de los mismos.

Ha hecho especial hincapié en que los menores "no pueden decidir qué institución o qué comunidad le atiende", por lo que considera que la movilidad "debería estar prohibida" y así cada institución que acoge en un primer momento a un menor debería hacerse cargo de él hasta que alcanzase los 18 años.

La diputada ha explicado que en Álava el problema fundamental no es la saturación de los centros", ya que se han ido habilitando 51 plazas nuevas en 2008, sino la "llegada descontrolada de los menores".

Ha recordado que el total de menores atendidos a lo largo del año pasado fue 178, de los que 141 fueron nuevos acogimientos, y que actualmente el número de menores extranjeros no acompañados acogidos bajo tutela pública en Álava es de 105.

De los actualmente atendidos, 29 están en instalaciones cedidas por la comunidad benedictina de Estíbaliz y otros ocho en el piso cedido por los jesuitas en el centro Loyola.

Para reubicar a los menores atendidos en estos dos centros se ha planificado el nuevo servicio de Molinuevo, que irá dirigido a menores con edades entre catorce y dieciocho años, con especial atención a la franja de entre dieciséis y dieciocho años.

Solaguren no ha facilitado la fecha de la apertura del nuevo centro, ya que se hará cuando esté "totalmente terminado y cuando tenga todos los permisos en regla".

Ha dicho que el coste de la habilitación de este nuevo edificio, propiedad del Obispado de Vitoria, es de un millón de euros y ha explicado que en el mismo se acogerá a una treintena de menores a los que se dispensará un plan individualizado, con apoyo escolar y deportivo y un nuevo programa de jardinería.

La diputada, a preguntas de los grupos, ha dado a conocer que actualmente hay un profesional por cada tres o cuatro menores acogidos, ya que se han incorporado a lo largo de esta legislatura 83 personas: cuarenta educadores, 28 cuidadores y quince monitores.