La huelga de jueces se cierra con un seguimiento del 38% en Baleares

Palma.-  Casi un 40 por ciento de los 101 jueces que ejercen en Baleares han secundado hoy la primera huelga en la historia de la Administración de Justicia española, un día que se ha cerrado sin incidencias y con concentraciones de protesta en las que los magistrados han reclamado soluciones urgentes a la precariedad.

La convocatoria, de carácter nacional, ha sido secundada en la comunidad solo por los jueces de Palma e ibiza, isla en la que el seguimiento del paro ha sido del 77 por ciento. Los partidos judiciales de Inca, Manacor, Mahón y Ciudadela han optado por esperar al 26 de junio, cuando se prevé un nuevo paro.

La cifra de diligencias, juicios y vistas aplazadas con motivo de esta jornada de huelga en Palma e Ibiza no se conocerán con exactitud hasta mañana, según han informado a Efe fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Baleares, órgano que ha ido centralizando la información remitida por los jueces en huelga.

El acto central de protesta ha tenido lugar precisamente ante la sede del Tribunal Superior de Baleares, donde alrededor de 65 jueces (más de la mitad del total que hay en las islas) se han concentrado para pedir al Ministerio de Justicia que atienda sus reivindicaciones y aporte soluciones a una administración que, a su juicio, arrastra numerosas carencias, algunas históricas.

La informatización adecuada del sistema, la mejora de las infraestructuras de las dependencias judiciales actuales y el incremento de la plantilla, dimensionada de acuerdo con la carga de trabajo actual, han sido algunas de las reivindicaciones que han recalcado hoy como indispensables para seguir negociando.

Las tres asociaciones judiciales con representación en Baleares (Asociación Profesional de la Magistratura, Francisco de Victoria y Jueces por la Democracia) junto con el juez decano de Palma, Francisco Martínez Espinosa, han señalado que para asumir el actual volumen de causas se precisaría duplicar la plantilla.

La carga laboral de los juzgados de Baleares, según ha explicado el juez Alejandro Roa, representante de la Asociación Profesional de la Magistratura, ha aumentado "con una proporción alarmante" debido a la crisis económica por la que pasa el país: "el volumen de entrada de asuntos se ha disparado, si en 2008 la cifra necesaria de jueces era X ahora habría que duplicarla", ha afirmado.

"Los jueces estamos cansados de que a través de la machacona invocación de nuestra condición de poder del Estado se pretenda que guardemos silencio ante tanta desidia, ante tantas carencias y tantos despropósitos. Por eso no nos queremos callar, porque nos haríamos cómplices de responsabilidades ajenas", ha dicho Espinosa.

A este sentimiento se han sumado el resto de asociaciones, al igual que los jueces de Ibiza que, desde que se habló por primera vez de huelga, han mantenido su respaldo a la movilización que hoy han secundado al igual que en Palma.

En Ibiza se han seguido las recomendaciones del comité nacional con el fin de "pre-avisar a las partes a primera hora de la mañana y ayer por la tarde", una medida que, según el juez Santiago Pinsach, "ha minimizado mucho las molestias".

El juez, miembro del Comité de Huelga, también ha destacado que los servicios mínimos han funcionado perfectamente y que "incluso han atendido más allá de lo urgente".

Respecto a las razones de la huelga, Pinsach ha confiado en que el paro sirva para retomar las conversaciones con el ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, y para que "se tomen en serio las reivindicaciones de los jueces".

Todos ellos, salvo un cambio en el talante negociador del Ministerio, mantienen una convocatoria de huelga para el próximo 26 de junio, a la que han acordado ir todos. "Esperemos que de aquí al 26 de junio no existan razones para realizarla", ha señalado Espinosa.