Al presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas, no se le ve mucho por Gaza. En la Franja es considerado 'persona non grata' por muchos y su enfrentamiento con el grupo radical palestino Hamás ha marcado la política palestina en los últimos tiempos. En muchos escenarios —parte del mundo árabe, fundamentalmente— Abbas carece de legitimidad. Sin embargo, en otros foros, parece el interlocutor válido para estos momentos de máxima tensión. Ya sea en El Cairo, Annápolis o en Jerusalén, Abú Mazén (su nombre de guerra) es recibido como todo un jefe de Estado, aunque no exista tal Estado oficialmente. Hoy ha tocado visita a España, donde delante de una bandera palestina colocada en la Moncloa ha recibido cinco millones de euros para atender a la población de estos territorios de la mano del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y ha pedido que cese el fuego de Israel contra Gaza.
Su discurso ha cambiado notablemente. Nada más comenzar el ataque hebreo Abbas culpó parcialmente a Hamás de provocar a Israel lanzando el primer cohete tras la ruptura de la tregua que ambos mantenían. El cariz que ha tomado el conflicto ha suavizado su postura contra el grupo islamista y ha llevado al mandatario palestino a tratar de tomar las riendas de las negociaciones en representación de los palestinos, pero su autoridad frente a los habitantes de Gaza, y más en concreto frente a Hamás, es poca.
Para empezar, su mandato de cuatro años termina oficialmente mañana. Aunque Abbas asegura que legalmente su legislatura ha sido extendida hasta 2010, el presidente de la ANP prometió legislativas y presidenciales anticipadas el pasado mes de diciembre. Apenas unas semanas después, los comicios han quedado eclipsados por la guerra. Si bien es cierto que la situación actual de Gaza no es la deseable para celebrar unas elecciones con todas las garantías, el problema llega porque Hamás se niega a reconocer la autoridad del presidente palestino más allá del nueve de enero. O lo que es lo mismo, desde dentro de unas horas. Además, Hamás ha rechazado la propuesta egipcia de parar las hostilidades —que contemplaba pasos como la apertura de puestos fronterizos, la entrada de observadores internacionales a la zona, la reconciliación palestina y el diálogo con Israel, entre otras cosas— a la que tanto Abbas como Israel se han mostrado receptivos.
En realidad, esta ruptura entre las Autoridad Nacional Palestina y Hamás se materializó hace meses, cuando Hamás expulsó de Gaza a las milicias de Al Fatah, cercanas al Gobierno. Fue en junio de 2007. Abbas destituyó al Primer Ministro, Ismail Haniye (Hamás), que ganó las legislativas de 2006. La decisión enfrentó a ambos grupos, despertando los fantasmas de una guerra civil, y quebró la unidad de los palestinos de Gaza y Cisjordania.
Así, mientras se han sucedido los acercamientos entre Israel y la Autoridad Nacional Palestina que gobierna en Cisjordania, Gaza, en manos de Hamás desde entonces, sufre un bloqueo por parte de Israel desde 2006.
El nuevo ataque, que pilla a Abbas en el ocaso de su mandato, coincide también con el que puede ser el ocaso de su influencia. Alistair Lyon, analista de la agencia Reuters, sostiene que el ataque a Gaza no ha hecho más que posponer el debate sobre la legitimidad de Abbas, que podría quedar todavía más maltrecha una vez que cese el fuego sobre la Franja.
"Los funcionarios de Hamás señalan a Abbas como si él hubiera ordenado que se desencadenase la guerra", asegura Ihad Zahdeh, un funcionario de la ciudad de Hebrón. Según él, al presidente palestino le va a costar labrarse la confianza de los habitantes de Gaza, que opinan que el mandatario no ha sido capaz de hacer nada para detener la agresión contra su pueblo. "¿Es esto lo que ha logrado a partir de las negociaciones de paz con Israel?", se pregunta Zahdeh.
Hay otras opiniones que apuntan a que la ofensiva Israelí podría lograr unificar a los palestinos con la idea de que todos están en el mismo barco y sufren por la ocupación israelí, y Lyon también se pregunta si todo esto disminuirá la capacidad de Abbas para avanzar en las hasta ahora infructuosas conversaciones de paz con Israel.
También podría ocurrir que la ofensiva contra Israel despertara más simpatías por Hamás dentro de los territorios palestinos, incluyendo Cisjordania. Bassem Ezbidi, analista político de la ribera occidental, opina que si Hamás resurge con fuerza de la guerra contra Israel, esto pondría a Abbas en aprietos al verse acorralado entre las exigencias de Israel y las de los islamistas.
Si quieres firmar tus comentarios, regístrate o inicia sesión »
En este espacio aparecerán los comentarios a los que hagas referencia. Por ejemplo, si escribes "comentario nº 3" en la caja de la izquierda, podrás ver el contenido de ese comentario aquí. Así te aseguras de que tu referencia es la correcta. No se permite código HTML en los comentarios.
Soitu.es se despide 22 meses después de iniciar su andadura en la Red. Con tristeza pero con mucha gratitud a todos vosotros.
Fuimos a EEUU a probar su tren. Aquí están las conclusiones. Mal, mal...
Algunos países ven esta práctica más cerca del soborno.
A la 'excelencia general' entre los medios grandes en lengua no inglesa.
Caminante no hay camino, se hace camino al andar. Citar este verso de Machado no puede ser más ocurrente al hablar de Mariano Rajoy. Tras la renuncia de Zapatero y las voces que señalan que la estrategia popular podría verse dañada, es necesario preguntarse algo. ¿Ha hecho camino Rajoy? ¿Se ha preparado para ser presidente? Quizás la respuesta sorprenda.
En: E-Campany@
Recomendación: Albert Medrán
“Algunos luchamos por tener los pies en suelo.” Lo decía ayer en su Twitter Raül Romeva, uno de los cuatro eurodiputados españoles (Oriol Junqueras, de ERC, Ramon Tremosa, de CiU, Rosa Estarás del PP y él, de ICV) que apoyaron la enmienda para evitar que el presupuesto comunitario de 2012 contemple los vuelos en primera clase de los parlamentarios europeos. No era una excepción. Lo escribía ahí porque es lo que hace siempre: ser transparente.
En: E-Campany@
Recomendación: Albert Medrán
Son los cien primeros, como podrían ser doscientos o diez. Lo importante es el concepto. La idea de tener unos días para llevar a cabo la transición desde la oposición al gobierno. Del banquillo, a llevar el dorsal titular. Nunca tendremos una segunda oportunidad de crear una buena primera impresión. Y los cien primeros días son esa primera impresión. Veamos su importancia.
En: E-Campany@
Recomendación: Albert Medrán
“Os propongo que sea el Comité Federal, en la próxima reunión que tengamos, después de las elecciones autonómicas y municipales, el que fije el momento de activar el proceso de primarias previsto en los Estatutos del partido para elegir nuestra candidatura a las próximas elecciones generales.” De esta manera, Zapatero ha puesto las primarias en el punto de mira tras anunciar que no será candidato a la reelección. Tras este anuncio, observamos algunas reflexiones sobre el proceso
En: E-Campany@
Recomendación: Albert Medrán
Lo sentimos, no puedes comentar esta noticia si no eres un usuario registrado y has iniciado sesión.
Si quieres, puedes registrarte o, si ya lo estás, iniciar sesión ahora.