Arias recibe la promesa de que Europa buscará una solución a la disputa del banano

Bruselas.-  El presidente de Costa Rica, Óscar Arias, abandona hoy Bruselas, tras dos días de visita a las instituciones de la Unión Europea, con la promesa de que Europa seguirá buscando una solución "satisfactoria para todos" en la disputa sobre el banano.

Los europeos han insistido, no obstante, en que no pueden "finalizar" el compromiso de reducción arancelaria alcanzado a finales de julio en Ginebra en paralelo a la fracasada negociación de la Ronda de Doha de la Organización Mundial de Comercio (OMC).

Durante esta estancia en Bruselas, el mandatario costarricense ha repetido su ruego a Europa de que vuelva a ser "generosa" con Centroamérica, una región a la que tanto ayudaron los europeos hace veinte años cuando las guerras civiles asolaban el istmo.

El presidente de la Comisión Europea, el portugués Jose Manuel Durao Barroso, ha declarado a los medios, tras recibir a Arias, que el Ejecutivo de la UE está "trabajando" para hallar una solución.

Los países latinoamericanos piden que se reduzca el gravamen de 176 euros por tonelada que la Unión Europea aplica al banano de Latinoamérica, y en Ginebra el 27 de julio los europeos ofrecieron reducir el impuesto hasta quedar en 114 euros en 2016.

Barroso ha vuelto a insistir, no obstante, que ese compromiso estaba "ligado" a la negociación paralela que se celebraba esos días sobre los objetivos de apertura de mercados agrícolas dentro de la llamada Ronda de Doha y que terminó con un fracaso.

El fiasco de las negociaciones de Doha hace, según Barroso, que la UE "no pueda finalizar" el acuerdo sobre el banano "en los términos en los que se presentaba".

"Ahora se evalúa la situación y la Comisión está intentando encontrar una solución satisfactoria para todos", ha dicho Durao Barroso, en referencia a la UE, los países de América Latina, y los del grupo ACP (África, Caribe y Pacífico); estos últimos están exentos del polémico arancel, por lo que rechazan que se reduzca para la fruta de Latinoamérica.

Después de entrevistarse con Barroso, Arias y el ministro costarricense de Comercio Exterior, Marco Vinicio Ruíz, se han reunido también con el comisario europeo de Comercio, Peter Mandelson.

En su comparecencia conjunta, el presidente de la Comisión Europea ha agradecido la visita de Arias, "una personalidad -ha señalado- que nosotros respetamos mucho aquí en Europa".

"Queremos continuar beneficiándonos de su opinión -le ha dicho Barroso a Arias-, de sus ideas, y contamos mucho con el papel de liderazgo que usted y Costa Rica tienen en Centroamérica y en el conjunto de América Latina".

Arias, por su parte, ha subrayado que para Centroamérica es "sumamente importante" que las negociaciones con Europa para un Acuerdo de Asociación concluyan en el primer semestre de 2009.

"Sería el primer acuerdo regional de la Unión Europea", ha precisado Arias, "y es especial que sea con Centroamérica, porque pienso que hay 40 millones de centroamericanos que viven eternamente agradecidos con la Unión Europea por habernos dado el apoyo moral y material en momentos difíciles, cuando los centroamericanos se mataban entre hermanos".

"Ahora, nada más bello que 21 años después podamos tener el apoyo económico que significa para cinco países centroamericanos muy pobres, en buena parte muy pobres como producto de esa guerra, donde murieron casi 350.000 centroamericanos, que Europa nos tienda la mano no sólo con cooperación, sino con un comercio cada vez más libre".

El presidente de Costa Rica ha vuelto a animar a Europa a que "realmente haga un esfuerzo por reducir aranceles, por lograr un comercio más libre" en el contexto del Acuerdo de Asociación.

"Para Europa (el comercio con el istmo) representa muy poco, un 0,2%, es casi insignificante; para nosotros en cambio es una gran oportunidad de poder tener acceso a un mercado de casi 500 millones de habitantes".

Ésa sería, ha insistido el mandatario costarricense, "la mejor ayuda, la ayuda generosa más grande que puede recibir Centroamérica, porque ésa sería la locomotora del crecimiento económico en una región como la nuestra".

Arias ha argumentado igualmente que, mientras que la democracia centroamericana y latinoamericana puedan "devolver sus frutos" a los pueblos de la región, "no habrá espacio entonces para demagogos y nuevos caudillos".