La operación salida culmina sin atascos y con una gran fluidez de tráfico

Barcelona.-  La operación salida de verano ha culminado sin atascos y con una gran fluidez de tráfico, lo que contrasta con el caos sufrido el pasado año, cuando hubo retenciones de hasta 70 kilómetros que obligaron por primera vez en Cataluña a levantar las barreras de los peajes.

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(EFE)

Imagen de la AP-7 en sentido sur a la altura del peaje de Tarragona este mediodía con motivo de la operación salida de agosto.

Según han informado a Efe fuentes del Servicio Catalán del Tráfico (SCT), hacia las 14.00 horas ya habían salido el 98% de los 465.000 vehículos que estaba previsto que abandonaran el área de Barcelona entre la tarde de ayer y la mañana de hoy.

A las 15.00 horas se ha dado por finalizado el dispositivo especial de tráfico de esta tranquila operación salida, que ha culminado sin retenciones ni atascos.

En declaraciones a Efe, el director del SCT, Josep Pérez-Moya, ha atribuido las pocas retenciones registradas ayer y hoy en las carreteras catalanas a la salida escalonada de los conductores, así como a las medidas adoptadas, en concreto el tercer carril de la AP-7 en Tarragona y la eliminación de los peajes troncales de esta autopista en El Vendrell y Tarragona.

Pérez-Moya ha destacado que la salida de vehículos ha sido "muy pausada y escalonada" lo que ha permitido que la tranquilidad haya sido la nota dominante y que las retenciones hayan sido, incluso, inferiores a las previstas por el SCT.

Los principales problemas y retenciones se han producido en la AP-7, en los peajes de Martorell y La Roca, en la provincia de Barcelona; en la zona norte en la salida de Figueres (Girona); y en El Vendrell y Tarragona, en el sur, además de en la C-31 en Platja d'Aro (Girona).

En concreto, en los momentos de máxima concentración de vehículos se han registrado colas en la AP-7, en el peaje de Martorell hacia Tarragona -7 kilómetros-; en el Papiol -7 kilómetros-; en el peaje de La Roca -3 kilómetros-; y en Tarragona -3 kilómetros-.

También ha habido nueve kilómetros de cola en la N-145, en Valls de Valira, en dirección a Andorra, después de que la frontera hispano-andorrana, cerrada desde minutos antes de las 20.00 horas de ayer debido al desbordamiento del río Runer como consecuencia de una tromba de agua que cayó en el Principado, se ha reabierto poco después de las nueve de esta mañana.

Asimismo, también se ha tenido que cortar desde la madrugada hasta la primera hora de la mañana la AP-7 en dirección Girona a la altura de Sant Celoni tras un choque frontal entre dos vehículos en el que han fallecido un ciudadano español y otro francés y otros dos franceses han resultado heridos de gravedad

Con relación a los accidentes, Pérez-Moya ha subrayado que es necesario ser "muy prudente" y esperar a que finalice la operación salida para hacer balance.