Asier Eceiza, un etarra casi más conocido por el 11-M y la 'conspiración'

Durante mucho tiempo, hubo quien buscó, a toda costa, la relación entre ETA y los atentados del 11-M. Unos lo hicieron con más sutileza y otros de forma más zafia. Cualquier cosa valía. Con la excusa de la investigación se fabricaron teorías peregrinas, se creaban afirmaciones falsas a partir de las cuales se construían tramas rocambolescas, se buscaban coincidencias anecdóticas para llegar a conclusiones más o menos cerradas. Antes de los autores intelectuales ETA era el objetivo. Luego llegó la sentencia y la banda terrorista que ha matado en España casi a 1.000 personas no apareció por ningún lado -salvo en el juicio, donde declararon dos etarras en lo que resultó un esperpento-.

Uno de los episodios más inverosímiles fue el de Asier Eceiza, el terrorista detenido hoy, con dos mandos en la mano subiendo las escaleras de la estación de Atocha después de detonar las bombas. Ya sabemos que en todos los grandes atentados se ha inventado teorías fantasiosas con fines oscuros negando lo más evidente. España no iba a ser menos, con la particularidad que aquí la 'broma' llegó muy lejos: al Congreso, a las portadas de los periódicos, a los partidos políticos, a las radios, a la calle, a las discusiones entre amigos...

Si recordamos este episodio del vídeo del hombre calvo en Atocha es porque acabó incluso en la Asamblea de Madrid. No fue sólo una cosa de difusión viral a través de la red, que también. Pongan en Google Asier Eceiza y 11-M y comprobarán hasta dónde se expandió el bulo. No. El asunto llegó más lejos. La página web del PP de San Martín de la Vega (y la del PP de Guadix, y la del PP de Foz....) colgó el vídeo de la manipulación, apuntando a ETA como autora de los atentados y acusando a Zapatero de pactar con la banda para hacerse con el Gobierno. El PSOE pidió la retirada y así se hizo.

Ahora Eceiza ha sido capturado en Francia, pero de lo que está acusado es de participar en el asesinato del concejal socialista de Orio Juan Priede y de intervenir en atentados contra hoteles de Alicante y Benidorm en junio de 2003 en los que resultaron heridas diez personas. Se encontraba huido desde la desarticulación, en marzo de 2002, del 'comando Donosti' que asesinó al edil socialista.