Calaf afirma que China acabará con la transparencia cuando haya demasiadas preguntas

Segovia.-  La veterana corresponsal de TVE Rosa María Calaf, que cubre la zona de Asia-Pacífico, ha advertido hoy en Segovia que aunque actualmente el Gobierno chino está permitiendo informar con "cierta libertad", la transparencia terminará en el momento en el que se hagan "demasiadas preguntas".

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(EFE)

En la imagen, la periodista Rosa María Calaf.

Calaf ha asegurado, en el seminario "El periodismo en lo global", que el régimen chino está reaccionando, tras el terremoto registrado el pasado 12 de mayo en Sichuan, "fiel a su forma de actuar de los últimos tiempos", ya que aunque ha experimentado una apertura económica, todavía continúa cerrado políticamente.

"Cuando termine este cierre se podrá informar mejor", ha dicho, aunque cree que es difícil que la situación cambie mucho más, porque el gobierno "tiene cuidado de que no se altere el poder".

Además, la periodista barcelonesa ha criticado que la gravedad del terremoto reside, mas allá de la inevitable catástrofe natural, en que las casas estaban "muy mal construidas", algo que ha atribuido a un funcionariado corrupto, a la indiferencia gubernamental y al olvido de Occidente tras la tragedia.

Bajo su punto de vista, ante la proximidad de los Juegos Olímpicos, que se celebrarán en Pekín el próximo mes de agosto, el Gobierno sabe que "tiene que dar una cara amable", aunque no ha dudado en endurecer las condiciones de los visados a los extranjeros y poner trabas a sus propios ciudadanos, porque lo que quiere es organizar unos "grandes juegos" pero con sus masas, no con las de fuera.

Calaf ha matizado que a los representantes políticos les preocupan más la imagen que ofrecen ante su propia gente que ante los extranjeros, ya que por el momento, el régimen tiene que asumir el papel de preocuparse del bienestar del país tras el terremoto y las olimpiadas, para no vivir una situación similar a la de URSS en la Guerra Fría.

En este sentido, la periodista cree que las protestas en el Tíbet se van a volver en contra de los tibetanos tras los Juegos, ya que pronostica que habrá una dura represión por parte del Gobierno.

Rosa María Calaf, que en los casi 40 años que lleva trabajando en TVE ha pasado por las corresponsalías de Moscú, Viena, Buenos Aires, Nueva York y Roma, vive actualmente en Hong-Kong, desde donde cubre todo el sudeste asiático y Oceanía.

En cuanto a su labor como corresponsal, y cuando está a punto de cumplir 64 años, ha afirmado que es "difícil" contar lo que sucede en un determinado momento de una forma equilibrada y no irse "hacia un extremo o hacia otro".

La veterana periodista ha subrayado que desde la televisión y la prensa está habiendo un deterioro "horrible" de la información, ya que actualmente predomina la información de entretenimiento, de la que ha dicho no le preocupa que sean los humoristas los que informan, sino los periodistas los que pretenden entretener.

Calaf se acogió en 2007 al Expediente de Regulación de Empleo de TVE, aunque todavía sigue en Hong Kong para cubrir los acontecimientos previos a los Juegos Olímpicos, ya que el director general del ente público "se sacó de la chistera este año más", como ella ha misma ha bromeado.

Entre otros muchos galardones, ha recibido el Premio Ondas a la mejor labor profesional, el premio a 'Toda una vida' de la Academia de la Televisión y el premio Cirilo Rodríguez al mejor trabajo de corresponsal en el extranjero.