Rudy, DKV, y Marc Gasol, Akasvayu, cara a cara a la caza de un título y un hueco en la Euroliga

Turín (Italia).-  Con permiso de Svetislav Pesic, los caminos de la final a ocho de la Copa ULEB de Turín estaban marcados: los dos mejores jugadores de la ACB, símbolos de futuro del baloncesto español, Rudy Fernández (DKV Joventut) y Marc Gasol (Akasvayu Girona), estaban predestinados a encontrarse en la final del torneo. En juego, mucho más que un título; una plaza en la Euroliga y el prestigio europeo.

Joventut y Akasvayu jugarán mañana (18.30 horas) en el Palavela de Turín la final de la ULEB tras derrotar hoy con solvencia a Galatasaray (90-83) y Dynamo de Moscú (78-81), respectivamente. La final, fiesta del baloncesto español con acento catalán, será la segunda final europea entre dos equipos españoles, después de la Copa Korac de 1999 que el Barcelona ganó ante el Estudiantes.

La actuación de los dos mejores jugadores ACB, Rudy Fernández y Marc Gasol será determinante para decidir el equipo que recogerá el testigo del Real Madrid, campeón de la ULEB en 2007. Ambos lideran a sus equipos, y también las principales estadísticas de la ACB. El escolta de la 'Penya' es el mejor anotador, con 21 puntos de media por partido. A cambio, Gasol, empeñado en dejar de ser el hermano de Pau, es el mejor reboteador, 7,9 por partido.

Para redondear la estadística y preparar un partido de claro color ACB en Turín, Rudy y Gasol encabezan la lista de jugadores mejor valorados de la ACB. Primero el pívot de Akasvayu, MVP de la Liga. A escasa distancia, Rudy Fernández, futuro jugador de la NBA que busca en Turín su segundo título de la temporada. Nunca antes ha logrado el Joventut dos títulos en una misma temporada. Tampoco el Akasvayu, campeón de la Copa Fiba el año pasado en Fontajau.

Eclipsados por la ascendencia de sus dos gigantes, Joventut y Akasvayu comparecen en la final de la ULEB con dos plantillas solventes y acreditadas para levantar el trofeo. En cualquier caso, ganará el baloncesto español, que tendrá a tres ganadores en el palmarés de la ULEB.

El equipo de Badalona representa la juventud y el descaro, el juego festivo y alegre que suele agradar a los espectadores y no tanto a su entrenador. Además, cuenta con un jugador tan brillante como carismático, Ricky Rubio, la precocidad convertida en solvencia.

El Akasvayu, en cambio, presenta un equipo de más edad. McDonald lo ha demostrado en los partidos de Turín con su veteranía en los momentos clave. La ilusión por coronar su participación europea puede ser el mejor argumento del equipo de Pedro Martínez.

Los dos equipos catalanes buscarán algo más que un trofeo europeo en sus vitrinas. Los dos últimos campeones de la Copa FIBA (Joventut en 2006, Akasvayu en 2007) pelearán por un hueco en la próxima Euroliga. Ganar la ULEB lo garantiza, premio mayúsculo para dos clubes que han paseado por Turín su ADN baloncestístico con orgullo.

En las quinielas, el DKV parte con cierta ventaja. Disfruta de una plantilla más amplia y cuenta con más experiencia en partidos sin vuelta de hoja, como demostró en la Copa de Vitoria. En el banquillo, el entrenador más laureado del baloncesto español, Aíto García Reneses, reciente campeón de Copa, una institución en Badalona.

En Badalona también forjó su carrera en los banquillos Pedro Martínez, un técnico joven, encargado de guiar al Akasvayu en una temporada difícil tras la marcha de Pesic. Con Martínez ha explotado Marc Gasol, pero al técnico también cabe atribuirle el mérito de la reconstrucción del equipo, tras la marcha de Predrag Drobnjak y Jackson Vroman, y su capacidad para situarlo en la final de la ULEB contra los pronósticos que concedían más posibilidades al Dynamo de Pesic.