Los acusados niegan el tráfico de drogas y su condición de testaferros

Oviedo.-  Los nueve acusados que testificaron hoy en la vista oral que se sigue en la Audiencia Provincial contra una red de tráfico de heroína y cocaína han negado su relación con la venta de drogas, así como la condición de testaferros que la Fiscalía atribuye a varios de ellos por tener a su nombre bienes supuestamente adquiridos con el comercio de estas sustancias.

Después de que ayer se declarasen culpables quince de los veintinueve acusados, para los que el fiscal pide penas que suman 169 años y nueve meses de prisión, el tribunal ha tomado hoy declaración a nueve imputados más, muchos de ellos familiares, que han rechazado las acusaciones de dedicarse a la venta de drogas.

Así, los procesados han asegurado que el lenguaje encriptado que utilizaban en las conversaciones telefónicas grabadas por la Policía se refería a cuestiones como el intercambio de prendas de ropa para vender en los mercadillos en los que trabajaban o a encargos que se hacían entre ellos de productos como "chorizos o morcillas".

Uno de los imputados, E.B.G., para el que el fiscal pide 6 años de prisión, ha asegurado ante el tribunal que la balanza de precisión hallada en su casa la utilizaba "para la dieta" de su mujer y que desconocía el origen del molinillo aprehendido también en su domicilio y en el que se hallaron restos de heroína.

Por su parte, J.A.J.J., para el que el fiscal pide 5 años de prisión como presunto responsable de realizar los transportes de droga, ha admitido conocer a los acusados de ser los proveedores de la heroína, pero ha negado que las anotaciones que le incautó la Policía tuvieran relación con el tráfico de drogas.

Así, de acuerdo con su testimonio, leyendas como "co 2kg" que aparecían en un papel que llevaba cuando fue detenido no correspondían a la entrega de dos kilos de cocaína sino a los apuntes del material recibido de los proveedores del puesto que regentaba en varios mercadillos y hacían alusión a camisetas, casetes o discos compactos, algunos vírgenes y otros "de Bisbal".

También ha afirmado que la balanza digital que tenía en su domicilio -que dio positivo en un narcotest de cocaína- había llegado a su poder "de forma accidental" tras cerrar un trato con un comerciante portugués que no volvió a recoger dicho aparato.

Uno de los presuntos abastecedores de droga a la red, A.J.B., alias "Mario", para el que el fiscal pide 9 años por tráfico de estupefacientes, tenencia ilícita de armas y falsedad documental, ha asegurado ser "una víctima de la droga y no un beneficiario" y ha afirmado que las elevadas cantidades de dinero que manejaba procedían de la compraventa de vehículos, que no documentaba.

Según el fiscal, este acusado, condenado además por un delito de homicidio cometido en 1998 en Leganés, había adquirido con los fondos obtenidos por la venta de drogas un chalé en León en el que construyó una piscina que pagó en metálico y que presuntamente puso a nombre de otro de los imputados.

En estas actividades colaboraba su esposa, I.V., que ha afirmado haber puesto a nombre de una tercera persona el turismo BMW que adquirió tras vender una parcela de su propiedad para evitar ser localizada tanto por su marido, del que estaba separada en aquel momento, como por la familia del hombre al que éste había matado en Leganés y que la había amenazado con vengarse.

Tanto el supuesto propietario del chalé, en el que residían en régimen de alquiler A.J.B. e I.V., como la dueña de un segundo piso de León en el que esta última había residido antes como arrendataria han negado las acusaciones del fiscal de que ambos actuaban como testaferros de ambos para evitar la intervención judicial de las propiedades de los presuntos suministradores de drogas.

En el caso del chalé, A.J.B. pagó en metálico las obras de la piscina y la instalación de un sistema de seguridad en el interior de la vivienda en la que fueron halladas las escrituras del inmueble y una cartilla de ahorros del supuesto propietario, R.S.I., para el que el fiscal pide 4 años por un delito de blanqueo de capitales.