La OEA intenta restaurar la confianza entre Ecuador y Colombia para reanudar sus relaciones

Quito.-  Una misión de la Organización de Estados Americanos (OEA) se reunió hoy en Quito con la canciller ecuatoriana, María Isabel Salvador, para promover medidas que permitan restaurar la confianza y restablecer las relaciones diplomáticas entre Ecuador y Colombia.

La reunión de los delegados de la OEA con la ministra ecuatoriana de Relaciones Exteriores fue a puerta cerrada y tuvo como objetivo "restablecer la confianza y el diálogo entre las dos partes", según dijo a los periodistas, antes del encuentro, el diplomático boliviano Víctor Rico, quien encabeza la misión.

Mañana, la delegación tiene previsto viajar a Bogotá para entrevistarse con las autoridades colombianas, señaló Rico, quien dijo: "Conversaré con ambos gobiernos y se manejarán todos los textos por canales oficiales", por lo que no hará declaraciones.

Tras la primera entrevista con Salvador, la delegación de la OEA se reunirá de nuevo con la canciller junto con los ministros ecuatorianos de Seguridad Interna y Externa, Gustavo Larrea; de Defensa, Wellington Sandoval, y de Gobierno, Fernando Bustamante, según un comunicado de la Cancillería.

Un grupo de ex cancilleres y embajadores ecuatorianos y representantes del sector académico tiene previsto reunirse también hoy con la misión de la OEA, que finalizará su ronda de consultas en Quito mañana con una nueva entrevista con la canciller Salvador, antes de viajar a Bogotá.

Después de la visita a Quito y Bogotá, el diplomático boliviano dijo que informarán "al secretario general (de la OEA, José Miguel Insulza), porque él es el que está a cargo de la misión", por encargo de los cancilleres del organismo.

Los ministros de Exteriores de la OEA aprobaron el pasado 18 de marzo una resolución de "rechazo" a la incursión militar de Colombia en territorio ecuatoriano, para atacar un campamento de las FARC, por considerar que constituyó una violación de la soberanía e integridad territorial de Ecuador.

Esa incursión militar colombiana en territorio ecuatoriano provocó la actual crisis diplomática.

En el ataque militar colombiano, ocurrido el 1 de marzo, murieron 26 personas, entre ellas el portavoz internacional de las FARC, "Raúl Reyes", cuatro estudiantes mexicanos, un ciudadano ecuatoriano y un militar colombiano.

Ecuador, secundado por Venezuela y Nicaragua, rompió relaciones con Colombia y presentó una queja a la Cumbre del Grupo de Río y la OEA, que rechazaron el ataque colombiano a territorio ecuatoriano.

El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, presentó sus disculpas a Ecuador y prometió que no se repetiría la violación territorial el 7 de marzo, en la reunión de la Cumbre del Grupo de Río, en República Dominicana, donde el gobernante ecuatoriano, Rafael Correa, aceptó las disculpas y dio por zanjado el incidente.

Sin embargo, para restablecer las relaciones, el Gobierno de Quito ha reclamado "señales" de confianza a Bogotá y señalado que no se han producido, ya que el ministro colombiano de Defensa, Juan Manuel Santos, ha calificado de acción militar "legítima" el ataque a las FARC en Ecuador, pese al rechazo internacional.

Además, Correa ha acusado a Colombia de mantener una "ofensiva mediática" contra su Gobierno, al tratar de implicar con las FARC a miembros del Ejecutivo, entre ellos el ministro de Seguridad Interna y Externa, Gustavo Larrea, quien ha admitido que mantuvo contactos para buscar la liberación de secuestrados por la guerrilla.

La situación se complicó posteriormente, al conocerse que uno de los muertos en el campamento era un ecuatoriano, Franklin Aisalla, investigado por supuestos contactos con las FARC, ya que Correa ha señalado que supone "el asesinato" de un ciudadano de Ecuador en territorio de su país por tropas extranjeras.