En América prevalece el escepticismo sobre los posibles cambios en Cuba

Bogotá.-  Los países americanos expresaron hoy su escepticismo sobre la posibilidad de cambios democráticos en Cuba con la llegada de Raúl Castro al poder, al igual que la disidencia cubana y el exilio en Miami, que vaticinaron "más de lo mismo".

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(EFE)

Sin embargo, el presidente de la Cámara de Diputados, Patricio Walker, sostuvo que Raúl Castro "no tiene el liderazgo de su hermano", por lo que, a su juicio, "no será capaz de mantenerse en el poder por mucho tiempo".

"Ahora vemos al nuevo jefe (de Estado) y es lo mismo que el anterior", aseguró Tom Casey, portavoz del Departamento de Estado de EE.UU, que advirtió que continuará haciendo todo lo que pueda para "promover cambios positivos" en Cuba.

Sobre el levantamiento del embargo impuesto a la isla desde los años 60, la vocera de la Casa Blanca, Dana Perino, aseguró que el presidente George W. Bush piensa que "en estos momentos, sin cambios en el sistema de Gobierno en Cuba, enriquecería a la elite y afirmaría su poder".

Chile confió, por medio de su ministro portavoz, Francisco Vidal, en que "las decisiones que tomen el pueblo y el Gobierno cubanos sean las más acertadas para su futuro".

Sin embargo, el presidente de la Cámara de Diputados, Patricio Walker, sostuvo que Raúl Castro "no tiene el liderazgo de su hermano", por lo que, a su juicio, "no será capaz de mantenerse en el poder por mucho tiempo".

"Lo que presenciamos en Cuba el día de ayer es una transición familiar, no una transición democrática", señaló por su parte el presidente de El Salvador, Elías Antonio Saca, quien expresó, no obstante, que tiene "esperanzas" en que Raúl Castro "inicie un proceso de apertura".

Por su parte, el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, dijo que "la revolución cubana va para adelante y se sigue reafirmando como paradigma y guía moral del mundo".

"Cuba vivió un proceso electoral democrático", apuntó Ortega, al rendir homenaje y respeto "a los dirigentes que hoy gobiernan los destinos de Cuba".

Las declaraciones Ortega se producen un día después de que su colega de Venezuela, Hugo Chávez, otro aliado de La Habana, destacara que el paso de mando "no va a cambiar nada" y que "Fidel seguirá siendo la inspiración, el faro que iluminará estos caminos y estas batallas".

Para el secretario de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) y ex presidente de Ecuador, Rodrigo Borja, la llegada de Raúl Castro al poder crea una situación de "incertidumbre" y no se sabe "lo que pueda ocurrir. Falta el desenlace".

Borja opinó que diversos sectores de ese país habrían preferido otro gobernante porque la isla tiene "elementos muy competentes", tales como, según él, el vicepresidente Carlos Lage, y el titular de la Asamblea, Ricardo Alarcón.

El vicecanciller peruano, Gonzalo Gutiérrez, aseguró que su país mantendrá invariable sus relaciones y también seguirá oponiéndose al bloqueo económico a la isla.

En una carta de felicitación enviada el domingo a la isla, el presidente de México, Felipe Calderón, también expresó su disposición para continuar trabajando "por fortalecer los vínculos que unen a ambos países".

El escepticismo sobre una apertura democrática en la isla es mayor entre los miembros del exilio en Miami (EE.UU.), como Huber Matos, ex comandante de la revolución, quien declaró a Efe que lo ocurrido "es más de lo mismo, con algunas variantes. Raúl ha completado la sucesión del trono castrista".

Para la influyente Fundación Nacional Cubano Americano (FNCA), el Parlamento perdió la oportunidad para enviar una señal de "voluntad de cambio, al designar a una jefatura nueva que fuese capaz de afrontar de manera efectiva los espinosos problemas que enfrenta la nación cubana".

"Pero en vez de ello, optó por atrincherarse dentro de una mentalidad de búnker al nombrar no solamente a Raúl, hermano y fotocopia de Fidel, a la presidencia, sino al seleccionar como primer vicepresidente al más acérrimo y menos inclinado hacia la reforma", agregó un portavoz.

El comentario fue una referencia a José Ramón Machado Ventura, de 77 años, uno de los miembros de la vieja guardia de la revolución.

"No hay sorpresas, salvo el nombramiento de Machado Ventura, porque es del sector más ortodoxo del aparato", indicó en La Habana el líder de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), Elizardo Sánchez.

"Estos cambios de nombres no indican para nada que va a mejorar la situación de derechos civiles y económicos", dijo Sánchez, quien agregó que resulta "obvio" que ha "prevalecido una voluntad continuista bajo la apariencia de una sucesión familiar".

Por su parte, la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba dijo que aguarda "medidas trascendentales" con las que se "puedan comenzar a satisfacer desde ahora las ansias e inquietudes expresadas por los cubanos".

El escritor Antonio Orlando Rodríguez, residente en Miami y ganador de la XI edición del Premio Alfaguara de Novela con su obra "Chiquita", dijo a Efe que no pierde la ilusión ni la esperanza en que "se produzca una verdadera transformación".