'Huevos de oro' a la tercera va la vencida

Sin alfombra roja. Ni modelos de alta costura. Tampoco habrá ceremonia ni cena distendida entre lo más chic del famoseo hollywoodiense. Es probable que ni siquiera haya muchos actores o candidatos entre los asistentes a la gris conferencia del hotel Beverly Hilton que desvelará los ganadores de la 65 edición de los Globos de Oro. Pero a Javier Bardem no le importará. Al Javier Bardem que protagonizó la 'Huevos de Oro' de Bigas Luna le parecerá bien si está nominado a un Globo.

(EFE)

'La fiesta de hollywood' se celebrará sin gala.

Probablemente lo verá desde la habitación de su hotel y luego, gane o no, acudirá a alguna de las fiestas que no se cancelen, si es que alguna queda en pie. Es su tercera nominación a los Globos de Oro. Y ya se conoce la cena. Primero fue en 2001 por 'Antes que anochezca', de Julian Schnabel y en 2005, por 'Mar adentro', de Alejandro Amenábar. Entonces ganó amigos. Ahora quiere el premio, el segundo galardón más importante de la industria del cine después de los Oscar, el Globo de Oro al mejor actor de reparto por 'No es país para viejos', de los hermanos Coen. Y no le importa no estar en la cena ni dar un discurso si le dan el premio porque está apoyando al gremio de los guionistas. Como él, muchos de los candidatos han cerrado trinchera en torno a las escritores, sin los que no podría existir esta industria. Y si hubiera gala y ganara y diera un discurso, en éste hablaría, seguro, de las reivindicaciones guionísticas. Ya ha protestado por otras cuestiones en otras galas.

Será una pseudocelebración, pero permanecerá lo importante. Es decir, valorar el talento y el trabajo de los directores, actores, guionistas, técnicos, etc. de cine y televisión a lo largo de un año. Se decía que la gala de los Globos de Oro era "la mejor fiesta de Hollywood". Si es así, la Asociación de Prensa Extranjera de Hollywood entregará los premios con la cabeza alta, sin protestar, pese a que la NBC, canal encargado de retransmitir el evento, perderá más de 20 millones de dólares en ingresos publicitarios.

En esta edición, una película británica se eleva, a priori, por encima de las demás. 'Expiación', de Joe Wright y protagonizada por Keira Knightley, recién estrenada en nuestro país. Un film que se ama o se odia, a la vista de las críticas recibidas. Tiene siete candidaturas. Cinco tiene 'La guerra de Charlie Wilson' y cuatro la cinta de los Coen y 'Sweeny Todd', de Tim Burton. Cate Blanchett y Philip Seymour-Hoffman están nominados por partida doble, como intérpretes protagonistas y de reparto. Otros candidatos ilustres son Angelina Jolie, George Clooney, Daniel Day-Lewis, Johnny Depp o Tom Hanks. Destaca que Clint Eastwood tiene dos candidaturas, la de Mejor Banda Sonora y la de Mejor Canción por 'Grace is gone'. A la misma opta, como compositora, la cantante colombiana Shakira, por el tema principal de 'El amor en los tiempos del cólera'. También está entre los nominados otro ilustre español: el compositor Alberto Iglesias.

El de Mejor Director se lo reparten entre Tim Burton, los Coen, Julian Schnabel, Ridley Scott y Joe Wright. Algunos más consagrados que otros pero ningún principiante. Otro 'damnificado' por la huelga de guionistas, éste sí que no es principiante, ha sido Steven Spielberg, que iba a recibir el Globo de Oro honorífico Cecil B. De Mille. Tendrá que esperar a 2009. Pero tampoco le importará. Ya tiene seis de estos galardones en su casa. Y también comprende a los escritores. Además, cuando te dan un premio honorífico es que llevas demasiado en esta industria y los jóvenes van a retirarte. Que no te ven capacitado para hacer algo más premiable. Y a Spielberg aún le queda guerra que dar.

¡Mucha mierda a Bardem y a los otros! Pero, oye, más para Bardem que ya se lo merece. Si vas tres veces, tiene que haber algún premio. Y sin gala ni cena ni fiestas ni cóctel, menos mierda que limpiar. ¿Qué importa más... el cine o lo que lo rodea?