La CE pide a Turquía y a los países balcánicos que intensifiquen las reformas

Bruselas.-  La Comisión Europea pidió hoy a Turquía y a los países de los Balcanes occidentales que aspiran a ingresar en la UE que intensifiquen el ritmo de sus reformas políticas, después de un año de progresos "constantes, pero desiguales".

En sus informes periódicos sobre los avances de los países candidatos y aspirantes a la adhesión, publicados hoy, el órgano ejecutivo de la UE llama la atención sobre los "importantes desafíos" y los "riesgos" que se ciernen sobre esta nueva frontera de la ampliación.

La eventual independencia unilateral de Kosovo, la tentación nacionalista en Serbia y la parálisis de Bosnia-Herzegovina como Estado son, sin atreverse a llamarlos por esos nombres, los tres fantasmas que preocupan a Bruselas.

La actual agenda europea de la ampliación incluye a Turquía y Croacia, que ya han comenzado a negociar su adhesión, aunque a ritmos muy distintos; a Macedonia, que ha sido reconocida como "candidata", pero aún no negocia con los Veintisiete, y a Albania, Bosnia-Herzegovina, Montenegro y Serbia, estos últimos como "candidatos potenciales".

En sus exámenes de este año, la Comisión no anuncia ninguna novedad sustancial en relación con las aspiraciones de estos países y se limita a formular el deseo de que en 2008 todas las ex repúblicas yugoslavas puedan haber concluido con la UE acuerdos de estabilización y asociación, antesala de la candidatura al ingreso.

El comisario para la Ampliación, el finlandés Olli Rehn, hizo pública, no obstante, la decisión de la CE de proceder mañana, en Bruselas, a la rúbrica del acuerdo de estabilización con Serbia, lo que significa que da por concluidas, técnicamente, las negociaciones.

La medida tiene más trascendencia política que práctica, pues el acuerdo no podrá entrar en vigor hasta que no lo firmen los Veintisiete y ello no ocurrirá mientras Belgrado no coopere "plenamente" con el Tribunal Penal Internacional que juzga los crímenes cometidos en la antigua Yugoslavia (TPIY).

La Comisión ofrece esta pequeña zanahoria a Serbia en un momento en que se le exige "huir de la retórica nacionalista", detener y entregar al TPIY a los últimos fugitivos (entre ellos los serbobosnios Radovan Karadzic y Ratko Mladic) y adoptar una actitud "constructiva y creativa" en las negociaciones cara a cara con los independentistas albano-kosovares.

Preguntado repetidas veces sobre el impacto que podría tener para este esquema una declaración unilateral de independencia de Kosovo el 10 de diciembre, el comisario no quiso especular y solamente subrayó la importancia de una solución estable que contribuya a la seguridad regional y garantice un Kosovo democrático y multiétnico.

Por otro lado, la Comisión Europea aprovechó la presentación de los informes para enviar una señal de reconocimiento y estímulo a Turquía.

"En 2007 Turquía ha superado una grave crisis política dentro del respeto a la democracia", afirmó Rehn.

A continuación, el responsable europeo animó a las autoridades turcas a recuperar ahora el impulso de las reformas políticas, en particular las relacionadas con las libertades fundamentales.

Rehn volvió a dejar claro que la UE condena "totalmente" los "ataques terroristas" a cargo del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) y "reconoce" el derecho de Ankara a defenderse, pero pidió a Turquía moderación en su respuesta.

Instó a las autoridades turcas a buscar una "solución política" al problema kurdo a través de la "cooperación" con Irak y las organizaciones regionales.