La Unión Europea invita a debatir sobre mujer y política

Con ocasión del Día Internacional de la Mujer, y ligado a las próximas elecciones al Parlamento Europeo, la vicepresidenta de la Unión Europea, la sueca Margot Wallström, ha lanzado una iniciativa para debatir sobre el papel de la mujer en la política. El debate tendrá lugar hasta el próximo 25 de marzo, día a partir del cual la comisaria responderá a los comentarios. Eso sí, sólo podrás aportar tus opiniones si sabes inglés.

Margot Wallström durante su visita a Madrid

El debate se inscribe en algunos de los esfuerzos  que Wallström, que se encarga también de la política de comunicación y participación, ha desarrollado para facilitar la discusión de los ciudadanos europeos en las decisiones tomadas por las instituciones comunitarias.

Entre ellas se encuentra también la creación de una web, patrocinada por organismos europeos, pero no oficial, donde se recogen propuestas de los ciudadanos a las instituciones, y que sigue el modelo organizado alrededor de la campaña del presidente Barack Obama, del que ya nos hicimos eco anteriormente. Según las cifras de los organizadores, de los que se hacía eco Soitu hoy mismo, los españoles son los que más están participando. 

Uno de los problemas con los que tropieza esta participación a escala continental es la barrera lingüística. La forma más ortodoxa ha sido la creación de foros en todos los idiomas oficiales de la Unión, como los existentes en la web Debate Europa. El año pasado se creó incluso un subforo en catalán, el primero en una lengua no oficial, que gozó además de un éxito notable.

El problema de esta solución, sin embargo, es que de esta manera el foro se segmenta nacionalmente, sin que ello ayude a hacer avanzar la conciencia europea común, y sin que quede la seguridad de que los responsables comunitarios atiendan las conclusiones de los foros menos concurridos.

La alternativa a la segmentación lingüística por parte de algunas instancias está siendo promover el empleo del inglés como lingua franca de los debates europeas. Es lo que ha ocurrido con el debate que anunciábamos sobre la participación de las mujeres en política. Si se pretende acceder a la página en castellano se lee una nota indicando que el debate sólo está accesible en inglés.

Se trata de un atentado a la equidad, que impide la participación en igualdad entre los ciudadanos, y un empuje más hacia una concepción elitista del debate europeo. Sólo una parte mínima de la población europea puede mantener un debate de alto nivel en inglés, pero, sobre todo, esta proporción está sesgada hacia un área geográfica y cultural específica. No es extraño, en consecuencia, que la voz principal que destaque en este tipo de iniciativas sean, paradójicamente, las de los euroescépticos británicos.

Esta solución de la comisaria Wallström no sorprende, ya que la política lingüística de la comisaria se mueve tradicionalmente en estos derroteros. Su blog, el más actualizado y visitado de los varios abiertos por comisarios europeos, privilegia el uso del inglés, que es usado en la gran mayoría de entradas. Incluso su artículo sobre su reciente viaje a Madrid fue escrito en esa lengua, a pesar de la existencia de unos magníficos servicios de traducción en Bruselas. De nuevo, el debate fue monopolizado no por españoles, ni por socialistas europeos (el viaje se debió a una reunión de políticos de esa tendencia), sino por la extrema derecha inglesa.

Hay una solución a este problema de comunicación evidenciado, que la Comisión se obstina en ignorar, pero que ha sido planteada seriamente en el Parlamento, el organismo donde más se sufre el caos lingüístico, y donde se sientan los únicos políticos elegidos directamente por los ciudadanos. Se trata de estudiar las posibilidades de empleo de una lengua común y neutral, el esperanto. El empleo del esperanto es también una de las propuestas con más apoyos en la iniciativa de consulta a los ciudadanos que citábamos anteriormente. Pero a los tecnócratas que se llenan la boca hablando de participación, pero que no tienen que responder a elecciones directas, no parece ilógico que no les interese una solución democrática.

En cualquier caso, por encima de debates más o menos sesgados, si con ello se consigue que aumente la proporción de mujeres en Parlamento en las próximas elecciones, el resultado habrá valido la pena. Feliz Día de la Mujer.