Martínez tendrá doble responsabilidad cuando abra el segundo partido

Nueva York (EEUU).-  La gran victoria por 6-1 que consiguieron los Filis de Filadelfia en el primer partido de la Serie Mundial, con el lanzador Cliff Lee como figura, colocó al dominicano Pedró Martínez, abridor del segundo juego, con doble responsabilidad.

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(EFE)

El jugador de los Filis de Filadelfia Pedro Martínez en acción ante los Dodgers de Los Angeles. EFE/Archivo

Pero para Martínez, que el pasado 25 cumplió 38 años, ya no hay nada que le generé presión y mucho menos volver de estelar al nuevo Yankee Stadium, donde con toda seguridad no sólo tendrá de enemigos a la artillería pesada de los Yanquis sino también a sus fanáticos, que no perdonan el daño que les hizo cuando jugó con Boston.

Martínez dice encontrarse preparado para lanzar hoy, jueves, en su regreso a Nueva York, en donde primero se convirtió en villano lanzando para los Medias Rojas, y luego en el estrella de los Mets, el equipo metropolitano que milita en la Liga Nacional.

El lanzador derecho dominicano declaró en conferencia de prensa que "no sé porqué ustedes consideran que soy uno de los jugadores con más influencia en el Yankee Stadium".

Martínez agregó que "tengo mucho respeto por la forma en que los aficionados disfrutan el juego de la pelota. Algunas veces lo critican a uno sólo por la forma en que uno viste, pero finalmente son unos buenos aficionados que lo único que quieren es ver ganar a su equipo".

El lanzador de 38 años también dijo sentirse apenado por la pelea que sostuvo con el ex entrenador Don Zimmer durante un conflicto entre las bancas de los Medias Rojas y los Yanquis, hace seis años.

Cuando un intento de pleito se suscitó en el Fenway Park, Zimmer, entonces de 72 años, se dirigió a Martínez, quien sin pensarlo mucho lo tomó de la cabeza y lo lanzó al suelo.

El incidente se inicio cuando el dominicano golpeó con un lanzamiento al mexicano Karim García, nada más comenzar el partido.

"Fue una escena fea", dijo Martínez, quien agregó que ésa era probablemente la primera vez que discutía de manera tan pública, porque no tiene un estilo y personalidad agresiva.

"Recuerdo que "Zim" me empujó, así que pensé que él haría algo más, lo que quería en golpearme en la boca y además se refirió a mi madre de manera grosera. Sólo reaccioné y me defendí", explicó Martínez.

"Sé que pudo ser algo que debíamos dejar pasar y olvidar, porque fue una desgracia para el béisbol", dijo el dominicano, quien agregó que "incluso yo pensé que fue un error de mi parte, estuve involucrado en eso, y es uno de los momentos que no deseo volver a ver, porque yo no soy una persona violenta".

Cuando vio a Zimmer en el piso, Martínez dijo que pensó en su padre, quien murió el año pasado.

"Soy muy respetuoso de la gente de edad avanzada, y no disculpo un acto de esa naturaleza", reconoció Martínez, pero dijo que "no tenía otra opción más que responder".

El lanzador aseguró que le desagradó la manera en que los medios de comunicación hablaron sobre el hecho e incluso lo trataban de villano y monstruo cada vez que regresaba al Yankee Stadium.

"Creo que ustedes me han usado y han abusado de mí", les dijo a los representantes de los medios de comunicación presentes.

El dominicano continuó diciendo que "recuerdo las citas en los periódicos: "Aquí viene el hombre al que Nueva York ama u odia".

"Ninguno de ustedes han comido conmigo algún filete o arroz y fríjoles para entender quién soy yo. Quizá puedan hablar del jugador, pero del hombre que soy, no. Han abusado de mi nombre, han dicho y escrito muchas cosas".

"En una ocasión, cuando era agente libre hubo algunos comentarios de que yo hablaría con George Steinbrenner, y uno de sus colegas me puso en los periódicos con cuernos rojos y una cola. Eso es un símbolo demoniaco. Y yo soy cristiano. Estas cosas las tomo muy seriamente", denunció Martínez.

Comentó que "ese tipo de cosas son las que los aficionados usan para ver, para calificarme, y eso ha influido para que crean que soy una mala persona".

Martínez pasó la campaña anterior con los Mets con una serie de lesiones, y posteriormente firmó con los Filis a mediados de julio, para llegar ahora a la Serie Mundial.

En el segundo juego de la serie por el título de la Liga Nacional, lanzó bola de dos imparables en siete episodios, sin permitir carrera, en el Dodger Stadium.

Respecto del juego que abrirá en la Serie Mundial, Martínez admitió que "ahora ya tengo más edad, pero también soy más inteligente, por eso creo que mi experiencia jugará un papel importante el segundo partido".

Para Martínez será su segunda apertura en Serie Mundial, después de que lanzó siete episodios sin permitir carrera, y tres imparables, para los Medias Rojas contra los Cardenales de San Luis, en el 2004.