Los Yanquis llegan con su mejor marca y los Angelinos reivindicados

Nueva York (EEUU).-  Los Yanquis de Nueva York llegan a la serie por el título de la Liga Americana después de apoderarse del mejor registro en las mayores durante la temporada regular, mientras que sus rivales, los Angelinos de Los Ángeles recuperaron su condición de ganadores después de superar un comienzo irregular.

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(EFE)

El jugador de los Yanquis de Nueva York Alex Rodríguez celebra con sus compañeros de equipo después de anotar contra los Mellizos de Minnesota el pasado 11 de octubre, durante el juego tres de la división americana de la MLB que se disputó en el estadio Metrodome de Minneapolis, Minnesota (EEUU).

Ambos equipos disputarán el título de la Liga Americana a partir del viernes, cuando la serie al mejor de siete dé inicio en el nuevo Yankee Stadium, de Nueva York.

Los Yanquis, que consiguieron registro de 103-59, emergieron después de haber enfrentado una serie de circunstancias adversas, como el hecho de que su antesalista Alex Rodríguez se vio involucrado en un escándalo de uso de esteroides y después tuvo que ser intervenido de la cadera derecha.

El debut de Rodríguez en temporada regular no fue hasta el 8 de mayo, y durante la ausencia del antesalista el primera base Mark Teixeira, que se convirtió en el agente libre más costoso para el equipo, estaba pegando para sólo .198 de promedio de bateo.

Pero los Yanquis quisieron dejar atrás los aspectos extra deportivos y se enfocaron en la pelota para colocarse a 6,5 juegos detrás de los Azulejos de Toronto el 12 de mayo, cuando tenían marca de 15-17.

El regreso de Rodríguez fue un detonante para Teixeira, y ambos se combinaron para un total de 64 jonrones y 207 remolcadas, la mayor cifra conseguida entre dos compañeros de equipo en la Liga Americana, a partir del debut del tercera base.

Al final Teixeira bateó para promedio de .310 con 34 de sus 39 vuelacercas conectados después del 8 de mayo, la fecha que marcó el regreso de Rodríguez.

Los Yanquis empezaron a encontrar el camino rumbo a la serie final en el mes de junio, cuando en Atlanta iniciaron una racha de siete triunfos seguidos y ganaron 13 de 15, conseguidos desde el 24 de ese mes.

El equipo de Nueva York se colocó en el liderato en solitario en la División Este el 21 de julio y no volvieron a abandonarlo.

Los Yanquis tuvieron marca de 52-22 en la segunda mitad de la campaña, la mejor de las Grandes Ligas, y la mejor de la franquicia desde que consiguieron números de 50-20, en ese periodo en 1977.

Su serie de divisional contra los Mellizos de Minnesota no hizo más que corroborar el gran momento de juego y de gracia por el que atraviesan los Yanquis al barrer 30 la serie al mejor de cinco.

Mientras que los Angelinos tuvieron un inicio lento y vinieron de atrás para conseguir el título de la División Oeste de la Liga Americana.

Después de que el abridor novato de los Angelinos, Nick Adenhart, perdiera la vida en un trágico accidente automovilístico cuando un conductor presuntamente ebrio golpeó el coche en el que viajaba él junto con otras dos personas, el 9 de abril, el equipo quedó corto en su equipo de lanzadores.

Además de que el lineup no encontraba su mejor forma, las lesiones dentro del equipo hicieron mella en el rendimiento de los Angelinos.

Una de las bajas más notorias por lesión fue la del toletero dominicano Vladimir Guerrero, quien dejó de jugar 35 partidos debido a una lesión en el músculo del pecho.

El 11 de junio los Angelinos tenían porcentaje de .500 con marca de 29-29, pero el equipo empezó a tomar forma para hacerse del liderato de su grupo hasta el 11 de julio cuando estaban cerca de conseguir una "barrida" en una serie de tres juegos ante los Yanquis, en Anaheim.

Después del descanso del Juego de las Estrellas, los Angelinos mejoraron su rendimiento y pudieron mantenerse como líderes para concluir la campaña con registro de 97-65, con 10 juegos de ventaja sobre los Vigilantes de Texas.

El resurgir de Guerrero, y la consistencia en el bate del venezolano Bobby Abreu, junto a su compatriota Juan Rivera iban a ser decisivos para que los Angelinos también lograsen una barrida histórica de 3-0 ante los Medias Rojas de Boston en la serie divisional.

También el pitcheo comenzó a ser más dominador y regular para convertir a los Angelinos en equipo ganador.

La victoria ante los Medias Rojas no sólo fue una reivindicación histórica sino que además les ha dado la moral suficiente para llegar al enfrentamiento contra los Yanquis con el convencimiento que también pueden superar la serie y estar en el "Clásico de Otoño".