"Post it City", 25 ejemplos de toma de las calles en el limbo de la legalidad

Sao Paulo.-  "Post it City" llega a Sao Paulo (Brasil), una muestra sobre el fenómeno de la ocupación temporal del espacio público de las ciudades con las más variadas actividades, a veces en el limbo de la legalidad.

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(EFE)

La exposición, tras su paso por Barcelona y Santiago de Chile, y antes de acudir a Buenos Aires, trata de ilustrar de "forma elocuente a la ciudad como soporte de usos que aparecen y desaparecen".

Formada por textos, fotografías y vídeos, la exposición es resultado de una investigación en 25 ciudades, donde artistas, arquitectos, antropólogos y sociólogos analizaron los usos efímeros que los ciudadanos hacen de los espacios públicos.

La exposición, tras su paso por Barcelona y Santiago de Chile, y antes de acudir a Buenos Aires, trata de ilustrar de "forma elocuente a la ciudad como soporte de usos que aparecen y desaparecen", según explicó a Efe su comisario, Martí Perán.

Esas tomas del espacio público "no siempre son legales o ilegales, más bien son 'alegales', están en el limbo, y condenadas a una vida breve porque o se prohíben o se incorporan", apuntó Perán.

La investigación abarca mercadillos, desde el descomunal de La Salada en Buenos Aires a pequeños vendedores ambulantes, cementerios improvisados e incluso los espacios tomados por la "disidencia sexual".

Entre las ciudades representadas en la muestra, la argelina de Tinduf, donde miles de saharauis exiliados llevan más de tres décadas acampados en tiendas que se niegan a consolidar como una ciudad para recordar que mantienen la esperanza de volver a su país cuando termine la ocupación marroquí.

Según Perán, la investigación ha puesto de manifiesto que "las ocupaciones temporales del espacio público en Europa responden a una acción frente a los códigos, una manera de resistencia, como practicar 'skate' o beber alcohol, mientras en América se trata más de la supervivencia".

El comisario español explicó que el concepto de "post it" fue acuñado por el arquitecto italiano Giovanni Lavarra, e inspiró la muestra por su alusión al hecho de que se investigaron fenómenos "para no durar" y que desaparecen "sin dejar rastros".

El proyecto surgió en Barcelona en 2005, y desde ahí se llevó prácticamente a todo el mundo, con el auspicio de la Sociedad Estatal de para la Acción Cultural Exterior (Seacex) y la Agencia Española de Cooperación (AECID).

La investigación llegó a 25 ciudades, desde Tokio a Los Ángeles, pasando por Estambul, Nairobi, y por urbes latinoamericanas como Bogotá, Cali, Valparaíso, Buenos Aires y Sao Paulo.

Se creó una red de entre 300 y 400 artistas, arquitectos, antropólogos y sociólogos que se dedicaron a seguir, fotografiar y filmar los usos más o menos espontáneos y efímeros que del espacio hacían los habitantes de las grandes metrópolis mundiales.

El responsable de la investigación y muestra en Chile, Pablo Brugnoli, explicó a Efe que en la capital chilena, donde se realizaron cinco proyectos, se puso de manifiesto que "el espacio público no pertenece a nadie".

Para Brugnoli, el "post it" chileno se diferencia del "atlántico" en que "en Buenos Aires o Sao Paulo la informalidad genera estructuras tan grandes como las formales, mientras en Santiago aparece de forma más pequeña, mínima".

En Buenos Aires, al contrario, el "post it" de referencia fue el mercado de La Salada, una enorme mercado informal que aparece y desaparece dos veces a la semana.

Los arquitectos Adriana Vázquez, Paola Salaberri y Pío Torroja relataron, en declaraciones a Efe, que en el caso argentino hay que hablar más del "gris público", hechos que no son tanto fenómenos derivados de la informalidad como de lugares intermedios, un "post it más prolongado".

"Uno de los debates que quisimos traer a la muestra es el de no polarizar entre formal e informal, sino lugares intermedios entre lo legal y lo que no lo es", señaló Torroja.

"Nos encontramos con escenarios inciertos, donde nada está del todo determinado. La forma no está predeterminada", agregó Salaberri.

La muestra seguirá en Sao Paulo hasta el 29 noviembre antes de ser trasladada a Buenos Aires.