Los jueces de la Audiencia Nacional inspeccionan las obras y esquivan al arzobispo

Barcelona.-  Un grupo de magistrados de la Audiencia Nacional han realizado el reconocimiento judicial de los trabajos del futuro túnel del AVE que se llevan cabo junto a la Sagrada Familia, templo al que no han entrado a pesar de que en las puertas les esperaba el arzobispo de Barcelona, Lluís Martínez Sistach.

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(EFE)

El presidente del Patronato constructor de la Sagrada Familia, Joan Rigoll (d), y el arzobispo cardenal de Barcelona, Lluis Martínez Sistach (i), esperan para saludar a los cinco jueces de la Sala de lo contencioso-administrativo de la Audiencia Nacional, momentos antes de iniciar la visita hoy a las obras del túnel del AVE de Barcelona a su paso por la Sagrada Familia para analizar si los trabajos pueden afectar a la basílica, tal y como ha denunciado el patronato constructor del templo.

Los cuatro jueces, acompañados por abogados y peritos de Adif, ente responsable de las obras, y del equipo constructor de la Sagrada Familia, han conocido "in situ" los trabajos-piloto que se están realizando en la calle Mallorca -bajo la que discurrirá el túnel del AVE que conectará las estaciones de Sants y Sagrera- para garantizar la seguridad del templo de Gaudí.

La inspección no se traducirá en una sentencia inmediata sobre el trazado y, según el abogado de la Junta Constructora, Jordi Abel, habrá que esperar al menos seis meses -tras la valoración que hagan de los respectivos dictámenes- y cuando la tuneladora esté ya casi a la puertas de la Sagrada Familia, a no ser que ante el otro contencioso administrativo presentado por la Junta contra el proyecto global, la Audiencia decida una suspensión cautelar.

Aunque la Audiencia desestimó el primer recurso de la Junta contra el actual trazado, donde pedía que se paralizaran las obras del túnel por considerar que suponía un riesgo para el monumento -al pasar a menos de un metro de la fachada de Gloria-, se comprometió en una providencia a tutelar la construcción del muro pantalla de 240 metros de largo y 40 de profundidad para proteger los cimientos.

Por ello, esta visita de inspección de los magistrados de la sección octava de lo contencioso administrativo, "sin precedentes en la historia judicial española" -según el patronato de la Sagrada Familia- ha despertado una gran expectación mediática, que ha reunido a medio centenar de periodistas y cámaras.

La amplia comitiva judicial y de técnicos ha llegado a la zona en dos microbuses que se han introducido en la zona de obras vallada de la plaza de la Sagrada Familia. Tras colocarse los cascos, los jueces han recibido las explicaciones técnicas sobre la pantalla de pilones, a la vez que se les ha explicado que estos sufren un ligero desplazamiento que los peritos están analizando.

Adif ha encargado un estudio a la empresa Intemac sobre la viabilidad de este muro pantalla -que debería estar acabado en la primavera de 2010- y del que ya se han ejecutado varias columnas de prueba, aunque todas ellas a bastante distancia de la Sagrada Familia, ha denunciado Jordi Abel.

Los magistrados han recorrido a pie y en dos ocasiones el trazado en superficie del futuro muro pantalla, que pasa a escasos centímetros de la Sagrada Familia.

A pesar de que el arzobispo de Barcelona, acompañado por el presidente de la Junta Constructora, Joan Rigoll, les esperaba para saludarles en una de las puertas, la comitiva de los jueces, que no ha llegado a entrar en el recinto, ha evitado encontrarse con el representante eclesiástico.

Posteriormente, los jueces se han desplazado hasta las obras de La Sagrera, donde se está realizando la acometida del túnel.

Tras acabar la visita, Jordi Abel ha explicado a los medios de comunicación que este reconocimiento judicial servirá a los jueces para tener más elementos de opinión que los dictámenes en papel sobre la viabilidad del proyecto y que confía en que la Sala "tome conciencia de la trascendencia del tema" antes de dictar sentencia.

"Ahora han visto de lo que estamos hablando para tener una visión más exacta sobre los pilares de contención y su cercanía a la Sagrada Familia", ha dicho el abogado, quien ha explicado que los jueces no han querido "la foto" con Martínez Sistach, porque estaban llevando a cabo una prueba judicial extraordinaria, "como demuestra que haya venido toda la sala".

Según recoge la providencia de la Audiencia, afirma Abel, Adif aseguró que el trazado se podría cambiar "en cualquier momento", a pesar de los elevados costes que esta decisión conllevaría, por lo que esperan "total y absolutamente" que la sentencia sea favorable a los intereses de la Sagrada Familia y se paralice este trazado.

Por su parte, Pere Vallejo, portavoz de la plataforma AVE por el Litoral, contraria a la construcción del túnel por el centro de la ciudad, ha lamentado que no se les haya invitado a esta inspección, tras recordar que esta entidad representan a 53.000 vecinos "que -ha dicho- somos tan sagrados como la Sagrada Familia".