La patronal arremete contra la subida de impuestos y la "poca" austeridad

Madrid.-  La patronal salió hoy decepcionada de su reunión con la vicepresidenta segunda del Gobierno, Elena Salgado, y arremetió contra la subida de impuestos que planea el Ejecutivo, al que también criticó por estar preparando unos Presupuestos que no considera suficientemente austeros.

El presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Gerardo Díaz Ferrán, dejó claro el descontento de los empresarios ante la reforma fiscal que se prepara.

"No es el momento de subir impuestos", señaló a los periodistas tras reunirse con Salgado junto con el presidente de CEPYME, Jesús Bárcenas.

Para Díaz Ferrán, la subida impositiva supone un "grave error", en este momento de crisis, sobre todo la del IVA, porque irá en detrimento del consumo y de sectores como el turismo y el comercio, además de que mermará, en su opinión, la competitividad de las empresas.

Salgado confirmó a los empresarios su intención de elevar la tributación del capital y subir el IVA, pero no les dio detalles de la reforma fiscal. "Yo creo que no lo sabe", dijo Díaz Ferrán.

Además, el máximo responsable de la patronal recordó que la subida que decida el Consejo de Ministros -previsiblemente el próximo sábado- puede cambiar en la tramitación parlamentaria de las cuentas y dependiendo de los acuerdos a los que llegue el Gobierno con los partidos políticos para conseguir aprobarlas.

Sí les explicó la vicepresidenta que los Presupuestos de 2010 están condicionadas por tres cuestiones: la atención al desempleo, que costará al menos 16.000 millones de euros; el coste del nuevo sistema de financiación autonómica, que cifró en 8.000 millones, y el pago de los intereses de la deuda pública, cuya cifra no concretó.

El presidente de la CEOE volvió a pedir a Salgado en este encuentro una rebaja del Impuesto sobre Sociedades, especialmente para las empresas que apuestan por la reinversión, que supone, recordó, crear más empleo.

Advirtió de que una subida impositiva va en contra del crecimiento y de la creación de empleo y también criticó que el Gobierno no haya escuchado a la patronal en sus peticiones de acometer reformas estructurales.

"Si se estuvieran haciendo (las reformas reclamadas) probablemente estaríamos hablando de unas cifras de desempleo inferiores" y "no se tendrían que aportar 16.000 millones en 2010" para las partidas por desempleo, añadió.

Díaz Ferrán también criticó que las medidas de estímulo que se pusieron en marcha este año para que diversos sectores pudieran afrontar mejor la crisis se vayan a reducir a la "mitad" en las cuentas del próximo año, según les dijo la ministra de Economía y Hacienda.

Esta decisión no ayudará a que la economía se recupere según el presidente de la CEOE, quien también censuró los datos sobre el gasto público que le dio la vicepresidenta.

Señaló en este sentido que, del mismo modo que los empresarios y los trabajadores se están "apretando el cinturón" el Gobierno debería hacer lo mismo, algo que, en su opinión, no está ocurriendo.

Como ejemplo puso la oferta de empleo público, que según les explicó Salgado sólo se aumentará en 2010 para cubrir las bajas, pero los empresarios creen que no debería subir ni siquiera para eso.

Los presupuestos, añadió, podrían ser más austeros recortando más determinados gastos "y no mediante la subida de impuestos".

En la misma línea habló Bárcenas, para quien la subida del IVA y de otros impuestos traerá "más complicaciones para las pymes, los autónomos" y sectores como el comercio, y no debería aprobarse en un momento de "desconfianza del consumo" como éste.

Los Presupuestos "van a ayudar poco a la creación de empleo" en opinión de Bárcenas, quien también lamentó que Salgado sólo les expusiera la "filosofía" de estas cuentas pero "sin cifras puntuales".

"Habrá que esperar a ver cómo queda la negociación" parlamentaria de los Presupuestos, añadió.

Al igual que ocurrió la semana pasada con el encuentro con los sindicatos, desde el Ministerio de Economía no se quiso hacer una valoración de la reunión de hoy con la patronal, que duró poco menos de una hora.