Desarticulada una banda que estafaba a ancianos en Almería, con 3 detenciones

Almería.-  Agentes de la Policía Nacional de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras y de la Brigada Local de Policía Judicial de El Ejido (Almería) han detenido a tres personas y han desarticulado una organización criminal que, con diversas artimañas y engaños, se dedicaba a estafar a ancianos.

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(EFE)

Un coche de policía en un suceso. EFE/Archivo

Tras la investigación, han sido arrestados como presuntos responsables Elena G., de 31 años, y Lidia V., de 50, ambas de nacionalidad rusa, y Antonio F.C., de 51 años y natural de Almería, ha informado hoy en un comunicado la Policía Nacional.

El "modus operandi" era lograr la confianza de los ancianos para después dejarlos en la "ruina total" apropiándose de sus propiedades, según la Policía.

Un hombre de nacionalidad española y vecino de El Ejido, que aún no ha sido detenido, actuaba como persona de confianza al proponer al anciano que una chica de origen ruso se fuera a vivir con él a su domicilio a cambio de realizar las tareas domésticas y cuidar de él.

En principio, el perjudicado aceptaba dicha proposición, ya que en la mayoría de los casos el "gancho" dejaba entrever que existía la posibilidad de una relación sentimental con la chica.

Una vez que ya estaba interna, la mujer se ganaba la confianza del anciano estableciendo una relación afectiva y comenzaba a solicitarle regalos, el empadronamiento en su domicilio o la proposición de matrimonio.

Además, según la nota policial, las presuntas estafadoras también conseguían de sus víctimas la realización de actos de disposición patrimonial, como solicitar dinero de la pensión, de sus ahorros, hacer testamento a su favor, firmar escrituras para figurar como titular del domicilio de forma conjunta e incluso figurar como herederas del patrimonio.

Cuando las víctimas empezaban a percatarse de la situación real e intentaban ponerle fin rompiendo la vinculación con las chicas rusas y sacándolas del domicilio, miembros de la banda desarticulada les amenazaban físicamente y con advertencias de que iban a denunciar a los ancianos ante la Policía por malos tratos a estas mujeres.

La Policía averiguó que una de las implicadas había logrado obtener de este modo más de 50.000 euros y que incluso había tramitado la solicitud de una paga a la administración pública por tener un familiar dependiente.

Sus víctimas eran ancianos de más de 70 años, que vivían solos, sin apenas saber leer y escribir, que tenían algún tipo de enfermedad y un patrimonio importante.

Las investigaciones de la Policía aún continúan para detener a la persona que actuaba de "gancho".