El Gobierno destina 8,62 millones a 94 proyectos de cooperación en 2009

Zaragoza.-  El Gobierno de Aragón destina 8,62 millones de euros en 2009 a 94 proyectos de cooperación para el desarrollo que, con cargo al Fondo de Solidaridad, se realizarán en veinticuatro países.

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(EFE)

El Gobierno de Aragón destina 8,62 millones de euros en 2009 a 94 proyectos de cooperación para el desarrollo que, con cargo al Fondo de Solidaridad, se realizarán en veinticuatro países. EFE/Archivo

Estos proyectos, que incluyen también actuaciones de sensibilización en España, las llevarán a cabo 45 entidades con el objetivo de contribuir al progreso humano, económico y social de los países más desfavorecidos a través de varios instrumentos, como ayudas para necesidades básicas, para programas de desarrollo económico o social o para ayudas de emergencia humanitaria.

Esta cantidad supone un incremento del veinte por ciento con respecto al año anterior, y demuestra, según ha dicho hoy el presidente del Ejecutivo, Marcelino Iglesias, el "compromiso de apoyo a los países en desarrollo".

Precisamente hoy se ha presentado en Zaragoza el informe de evaluación del plan director de cooperación aragonesa 2004-2007, acto al que ha asistido Iglesias.

Entre 2004 y 2007 Aragón destinó a cooperación 98,62 millones de euros entre financiación pública (el 58,28 por ciento contando las aportaciones de las diferentes administraciones) y privada. La aportación del Gobierno de Aragón en este periodo fue de 24,25 millones de euros.

Veinticuatro países concentran más del cincuenta por ciento de la cooperación pública aragonesa, y el 56,69 por ciento de los proyectos impulsados desde Aragón se localizan en América Latina, según los datos expuestos en el acto por Francisco Javier Rodríguez Melón, técnico que ha realizado el informe.

La gran mayoría de los 1.336 proyectos puestos en marcha en el periodo 2004-2007 se destinaron a satisfacer necesidades básicas (625), seguido de los programas integrales (369).

Además de en Latinoamérica, donde se llevaron a cabo 670 proyectos, las acciones se concentraron en otras dos áreas geográficas: África Subsahariana (216) y Oriente Medio-Magreb (161).

Durante este tiempo, según Rodríguez Melón, se ha puesto de manifiesto la "vitalidad" y la "riqueza" del tejido asociativo aragonés, aunque también se traduce cierto "localismo" que puede lastrar y "dispersar" las intervenciones de los agentes de cooperación.

El informe de evaluación establece, como conclusiones, que el incremento del gasto en cooperación no se corresponde con el aumento de los recursos humanos y profesionales, y que aunque el plan de cooperación ha aportado una "mayor racionalización", existe aún un "alto nivel de dispersión de prioridades" y demasiados proyectos con un tiempo limitado de ejecución.

El plan, no obstante, ha impulsado que la cooperación forme parte de la "agenda política", a pesar de que el grado de implicación de las corporaciones locales es aún "débil".

El presidente Iglesias, por su parte, ha asegurado que las ayudas públicas para cooperación no deben de ser percibidas como un "fleco caritativo" de la acción pública y deben entenderse como acciones solidarias, "en un plano de igualdad", entre los países del Norte y los del Sur.

Ha hecho hincapié en que las ayudas públicas no sólo deben aumentar, sino que se debe garantizar la transparencia de éstas y su "calidad", y por ello es necesario un ejercicio de vigilancia.

En cuanto a las administraciones públicas, el presidente ha dicho que es necesario el "consenso" entre las entidades cooperantes para que la ayuda "conduzca a un cambio duradero", y más en la actual época de crisis económica y en un contexto en el que hay casi mil millones de personas que pasan hambre en el mundo.