Abás está dispuesto a reunirse con Netanyahu, si paraliza la expansión de los asentamientos

París.-  El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás, se declaró hoy dispuesto a reunirse con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, si congela la expansión de los asentamientos en los territorios palestinos.

Ese posible encuentro "dependerá de los pasos" y de las medidas que le puedan preceder en relación con la congelación de la construcción en los asentamientos judíos, dijo a la prensa el dirigente palestino, tras entrevistarse en París con el presidente francés, Nicolas Sarkozy.

Lo que "no es aceptable" para Abás es la supuesta intención de Netanyahu de aprobar la construcción de cientos de viviendas en los asentamientos judíos en Cisjordania, antes de declarar una moratoria en esta actividad para satisfacer las demandas de EEUU.

Eso es lo que ha indicado una alta fuente sin identificar de la Oficina del Primer Ministro citada hoy por los medios locales.

Al ser preguntado por esta cuestión, Abás insistió en que no es aceptable y subrayó: "lo que queremos es la congelación de los asentamientos y el lanzamiento de la fase final de las negociaciones".

Ese es el mensaje que el dirigente palestino transmitió hoy al jefe del Estado galo y ayer al ministro francés de Exteriores, Bernard Kouchner.

Sarkozy no habló a la prensa tras el encuentro con Abás, aunque el Palacio del Elíseo difundió un comunicado en el que precisa que el presidente francés subrayó ante su invitado "la urgencia" de retomar el proceso de negociaciones entre israelíes y palestinos destinado a crear un Estado palestino "viable, independiente y democrático".

Sarkozy dejó claro, añade la nota, que la creación de ese Estado palestino "será la mejor garantía de seguridad para Israel".

Opinó que, para poder reactivar el proceso de paz, es "determinante" que "cesen" las actividades de colonización, tal y como exige la comunidad internacional.

Durante el encuentro, Sarkozy y Abás evocaron también la propuesta de Francia y Egipto de convocar una cumbre de la Unión por el Mediterráneo (UPM) para apoyar el proceso de paz, una vez haya sido relanzado.

Ambos coincidieron en que, si se reúnen las condiciones necesarias para su celebración, esa cumbre aportaría una contribución "esencial" al proceso de paz.