Grandes duelos para Barça y Madrid, asequibles para Atlético y Sevilla

Montecarlo (Mónaco).-  El sorteo de la fase de grupos de la Liga de Campeones emparejó hoy a Barcelona y Real Madrid con dos viejos conocidos, Inter y Milan, como grandes rivales de sus grupos, mientras que el Atlético de Madrid peleará con Oporto y Chelsea y el Sevilla, el más beneficiado de los equipos españoles, se jugará la clasificación ante Stuttgart y Glasgow Rangers.

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(EFE)

El secretario general de la UEFA, David Taylor (d), durante el sorteo de la fase de grupos de la Liga de Campeones que se celebró en el Forum Grimaldi de Montecarlo, Mónaco.

La Liga de Campeones ofrecerá duelos de altura y con una notable carga histórica: Real Madrid-Milan y Barcelona-Inter. Serán los grandes partidos de la primera fase, con permiso del Bayern-Juventus. El resto de rivales de Real Madrid (Olympique Marsella y Zurich) y Barcelona (Rubin Kazan y Dinamo Kiev) no deberían poner en apuros a los dos grandes del fútbol español.

El Barça, vigente campeón, se enfrentará a los campeones de Liga de Italia, Ucrania y Rusia. Su rival más peligroso será el Inter de Milán, el equipo más temible del segundo bombo del sorteo. El azar fue caprichoso y deparó un enfrentamiento lleno de alicientes, con el duelo Samuel Eto'o-Zlatan Ibrahimovic como cabeza de cartel y apertura del curso en San Siro, el 16 de septiembre, después de su intercambio de clubes en verano. El regreso de José Mourinho al Camp Nou también volverá a animar al público azulgrana.

Miles de kilómetros y bajas temperaturas esperan también al Barcelona, que deberá viajar a Kazan (Rusia) y a Kiev, la capital de Ucrania, el 4 de noviembre y el 9 de diciembre, respectivamente, para completar sus partidos del grupo F. Ambos desplazamientos parecen a priori más complicados que los propios rivales.

El Real Madrid, que contó con la presencia de Emilio Butragueño como encargado de repartir las bolas con los grupos, en su condición de embajador de la final del Santiago Bernabéu, iniciará su camino hacia su final más deseada ante el Zurich, el rival más accesible del grupo C. Después le espera un viejo conocido, el Olympique de Marsella, segundo clasificado de la última Liga francesa, con Heinze y Morientes como jugadores más conocidos para el público de Chamartín.

El gran rival del equipo de Manuel Pellegrini será el Milan. El duelo remitirá a los grandes choques de los años 80 entre la Quinta del Buitre y el Milan de Sacchi y los holandeses. Ahora, otros dos holandeses con pasado madridista, Huntelaar y Seedorf, intentarán poner en aprietos al equipo blanco, que se enfrentará dos veces seguidas al Milan, el 21 de octubre en el Bernabéu y el 3 de noviembre en San Siro.

El sorteo ofreció al Atlético de Madrid una oportunidad de revancha. Jugará en el grupo D contra el Oporto, el equipo que le eliminó el año pasado en sendos empates (2-2 en el Calderón, 0-0 en Portugal).

También se las verá con uno de los grandes de los últimos años, el Chelsea, el gran favorito del grupo. Para empezar, el equipo de Abel Resino recibirá a la 'cenicienta' del grupo, el Apoel de Nicosia, debutante en la máxima competición continental.

Atlético y Real Madrid coincidirán siempre en la misma jornada de la fase de grupos: cuando uno juegue en casa, el otro lo hará a domicilio. Barcelona y Sevilla ocuparán la otra jornada.

Precisamente los responsables del Sevilla fueron los más sonrientes tras el sorteo del Fórum Grimaldi de Mónaco. El conjunto andaluz, cabeza de serie en el sorteo por delante de históricos como la Juventus, el Inter o el Madrid, quedó emparejado en el grupo G con el Stuttgart, el Glasgow Rangers (campeón de la Liga escocesa) y el gran desconocido de los 32 participantes, el Unirea Urziceni, sorprendente campeón de la Liga rumana, de una ciudad de 17.000 habitantes que trasladará sus partidos como local al campo del Steaua de Bucarest porque su estadio no reúne los requisitos mínimos exigidos por la UEFA.

El sorteo de la fase de grupos, convertido ya en una tradición anual que abre el curso futbolístico un día antes de la Supercopa de Europa, premió el gran rendimiento del Barcelona del triplete. Aunque Valdés y Piqué no fueron premiados como mejor portero y defensa (Van der Sar y Terry recogieron el trofeo), la UEFA galardonó a Xavi como el mejor centrocampista de la pasada temporada y a Messi, por partida doble, como mejor delantero y futbolista del curso. La carrera del argentino hacia el Balón de Oro y el FIFA World Player ya parece imparable.