María Luz Rodríguez dice que las 3 capitales del PP no han hecho ningún contrato de plan de choque

Toledo.-  Los ayuntamientos de Ciudad Real, Cuenca y Guadalajara, gobernados por el PP, no han hecho ninguna contratación del plan de choque por el empleo de Castilla-La Mancha, pese a que entre los tres suman más de 300 desempleados con credencial para trabajar, ha dicho la consejera de Trabajo, María Luz Rodríguez.

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(EFE)

La consejera de Trabajo y Empleo, María Luz Rodríguez, informa en rueda de prensa sobre los datos del Plan de Choque por el Empleo de Castilla-La Mancha.

Los alcaldes populares de las tres capitales de provincia "son los que tienen que explicar" el porqué, "yo sólo constato un hecho": aunque estos tres ayuntamientos están adheridos al plan de choque y hay trabajadores que cumplen los requisitos para ser contratados, aún no se ha formalizado ninguno, ha añadido Rodríguez.

La consejera ha informado hoy en una rueda de prensa sobre los principales datos del plan de choque al cumplirse tres meses de su entrada en funcionamiento para paliar los efectos de la crisis sobre los desempleados que "no tienen nada" porque han dejado de cobrar el subsidio, y de esta manera pueden acceder a un contrato de seis meses.

Con datos del 24 de agosto, en Castilla-La Mancha hay 1.755 personas trabajando gracias al plan de choque, lo que representa el 32 por ciento de los 5.636 acreditados porque cumplen los requisitos, y han sido contratados en 231 municipios -cien de los trabajadores han sido contratados por parte de empresas privadas-.

En cuanto a las credenciales, de las 5.636 el 58,7 por ciento corresponden a hombres y el 41,3 por ciento a mujeres; y por provincias, se han otorgado 1.455 en Albacete; 1.548 en Ciudad Real; 434 en Cuenca; 335 en Guadalajara y 1.864 en Toledo.

También por provincias, en Albacete hay 571 personas trabajando en 37 municipios, como la capital (139 contratos), Hellín, Villarrobledo, Almansa y Caudete, entre otros.

En Ciudad Real hay 61 municipios adheridos al plan de choque y en la capital se contabilizan 166 trabajadores acreditados, pero no se ha formalizado ningún contrato; sin embargo, sí hay personas trabajando en Bolaños, Daimiel, Puertollano, Alcázar y La Solana.

Lo mismo ocurre en la provincia de Cuenca, con 49 municipios adheridos y 105 trabajadores acreditados en la capital y ningún contrato, aunque sí en otras localidades, por ejemplo, Mota del Cuervo y Las Pedroñeras.

Veinte municipios de Guadalajara se han sumado al plan de choque, pero en la capital ninguno de los 98 trabajadores acreditados está todavía empleado, no así en Azuqueca, con 29 contratos.

En Toledo, son 64 los municipios participantes en el plan, y en las grandes ciudades como Talavera de la Reina y la capital hay 69 y 62 trabajadores contratados.

Con estos datos, la consejera considera cumplidas las expectativas pasados noventa días de la puesta en marcha del plan; además, ha anunciado que en octubre habrá una reunión de los firmantes del plan para hacer una evaluación y ver si fuera necesaria alguna modificación.

En cuanto a las ayudas estatales de 420 euros a los parados que han dejado de cobrar la prestación desde el 1 de agosto, ha insistido en que ambas iniciativas, la estatal y la autonómica, son "perfectamente compatibles".

A quienes desde el 1 de agosto se han acercado a las oficinas de empleo tras dejar de percibir la prestación se les han ofrecido las dos posibilidades, de hecho, en Castilla-La Mancha hay 134 desempleados que tienen la credencial del plan de choque regional y la solicitud de la ayuda del Gobierno central.

Uno puede cobrar el subsidio de 420 euros y, cuando es contratado por el plan de choque, automáticamente deja de cobrar esa ayuda, como sucede normalmente en las relaciones laborales.

El plan de choque consiste en contrataciones de seis meses, por al menos el salario mínimo interprofesional de 624 euros, de manera que, al terminar el contrato, el trabajador puede percibir las prestaciones a las que tiene derecho por haber trabajado durante ese tiempo.