Estallan tres artefactos de escasa potencia en locales de Palma de Mallorca

ETA ha vuelto a hacer acto de presencia en Palma de Mallorca. Una semana después del asesinato de dos guardias civiles y apenas unas horas más tarde de que la banda asumiera la autoría de varios atentados perpetrados en junio y julio, la organización terrorista ha colocado tres artefactos explosivos de 'escasa potencia' en dos restaurantes de la playa de Can Tere Antoni, y una galería comercial en el centro de la capital balear.

Ballesteros (EFE)

La Policía y Guardia Civil ha acordonado la zona de la playa de Can Tere Antoni.

El primero de los artefactos, de pequeño tamaño y escasísima potencia, ha hecho explosión en el restaurante La Rigoletta, en el Paseo del Portitxol a las 14:25 horas. Al parecer, se encontraba escondido en una mochila en el falso techo del servicio de las señoras y no ha causado ningún herido, a pesar de que en ese momento en el local se encontraban muchos clientes.

Tras la explosión, que se ha producido después de que una llamada anónima en nombre de ETA a radio taxi Guipúzcoa esta mañana alertara de la colocación de varios artefactos en Palma de Mallorca, el edificio ha sido desalojado.

Poco tiempo después, a las 16:03 horas, artificieros de la Guardia Civil desactivaban otro artefacto en un restaurante en la misma zona, situado en el número 15 de la calle Vicari Joaquim Fuster. En este caso el local había sido previamente desalojado. Las personas que se encontraban allí recibieron la instrucción de los agentes de que se marchasen del lugar "rápidamente", lo que les ha obligado a dejar todas sus pertenencias en los establecimientos y en la playa, zonas que han sido rastreadas minutos más tarde por los Tedax.

Tal y como había amenazado la llamada anónima en nombre de ETA, un tercer explosivo detonó en los baños de una galería comercial en la Plaza Mayor, situada en el centro del municipio y a unos 500 metros de los dos restaurantes. El delegado del Gobierno en Baleares, Ramon Socías, ha confirmado la explosión de estos tres artefactos y ha informado de que se está investigando el origen de un cuarto estallido (al mediodía) en el bar Nica, situado en una céntrica avenida de Palma.

Las habituales 'campañas de verano' de ETA

Ninguno de los tres atentados ha provocado heridos y su escasa potencia ha causado pequeños daños materiales. Los temporizadores que han activado los tres artefactos explosivos darán respuesta a la pregunta que se hacen los expertos en la lucha antiterrorista desde el pasado 30 de julio, cuando los terroristas asesinaron a dos guardias civiles: ¿permanecen todavía en la isla? La investigación baraja la hipótesis de que los ataques sean obra del mismo comando o de otro distinto. Incluso que los artefactos fueran colocados la pasada semana con temporizadores, antes de que los terroristas huyeran de la isla.

Otro año más, ETA vuelve a situar las zonas turísticas como objetivo durante el verano. Desde hace más de treinta años, los terroristas aprovechan los meses estivales para colocar explosivos en la costa, con el doble objetivo de provocar el caos y trasladar al resto del mundo una imagen insegura de España, perjudicando así a uno de los sectores motrices de la economía española. Durante estas siniestras 'campañas de verano', los asesinos han acabado con la vida de ocho personas, las últimas dos los guardias civiles Carlos Sáenz de Tejada y Diego Salva.

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