CCOO sugiere movilizaciones mientras UGT acepta la propuesta para auxiliares

Avilés.-  La asamblea de delegados sindicales de CCOO en la industria auxiliar de ArcelorMittal ha rechazado hoy la propuesta de la multinacional para internalizar a 300 trabajadores de este sector, mientras que desde UGT se ha respaldado la medida planteada por la dirección y USO es partidaria de seguir negociando.

La decisión de las asambleas de estos dos sindicatos deja sola a la central mayoritaria en el sector, CCOO, en su rechazo frontal a la propuesta de ArcelorMittal, contra la que incluso no descarta recurrir a las movilizaciones.

El secretario general de la Federación de Industria de CCOO, Maximino García, ha explicado al término de la asamblea que si bien no figura en el documento entregado a los sindicatos de la industria auxiliar, ArcelorMittal descarta integrar a los mayores de 50 años.

De nuevo el escollo es el tema de la edad, ya que la siderúrgica había accedido a retirar el límite inicial de los 48 años, pero en la mesa de negociación, aunque no figura por escrito, mantiene el techo en los cincuenta.

García ha hablado abiertamente de movilizaciones si la empresa no retira ese requisito porque no está dispuesto a tolerar "que se rechace a estos empleados por la edad, porque están desempeñando bien su trabajo".

"Vamos a intentar explicar a la empresa que se está equivocando a la hora de plantear este tipo de decisiones, pero lo que se ha decidido en la asamblea es que si eso no es posible convocaremos movilizaciones", ha recalcado.

Por su parte, la asamblea celebrada por UGT en Oviedo, a la que asistieron 49 delegados de todas las empresas auxiliares, dio su aprobación, por 48 votos a favor y uno en contra, al contenido del acuerdo con ArcelorMittal.

En un comunicado, UGT destaca que el acuerdo contempla la búsqueda del mecanismo legal necesario para que los trabajadores de las empresas auxiliares nacidos en los años 1950 y 1951 puedan acogerse a medidas que anticipen su jubilación.

UGT recalca que en el acuerdo se recogen garantías para que aquellos trabajadores de la industria auxiliar que no se incorporen a ArcelorMittal mantengan todas las garantías económicas, laborales, sociales y de empleo de su puesto de origen.

Por su parte, USO, a través de su representante Rafael Balbuena, ha calificado de "muy positiva" la estabilidad que proporciona el acuerdo para 1.800 trabajadores y la "salida no traumática de 200", aunque ha reconocido que ve "claroscuros" en el proceso de internalización de los 300 propuestos.

Por esa razón, la asamblea de delegados de USO celebrada hoy en Avilés ha pedido más tiempo para negociar algunos aspectos del acuerdo que no convencen al sindicato.

En declaraciones a Efe, Balbuena ha aseverado que "no es una negativa frontal, pero que hay algunas cosillas que se pueden mejorar y por eso queremos seguir con la negociación".

Mientras para CCOO, el establecimiento de un tope de edad, a los cincuenta años, para los trabajadores que entrarían a formar parte de la plantilla de ArcelorMittal es innegociable, para USO puede ser un escollo, pero no insalvable.

Ese tope de edad afectaría a unas ochenta personas, según el representante de USO, "y el plan que se está negociando es para 2.400 trabajadores", ha recalcado.

Las posiciones enfrentadas que mantienen los sindicatos dificulta así la negociación del plan de ordenación de la industria auxiliar de ArcelorMittal en un momento en el que la multinacional da pasos para su normalización desde que se desatara la crisis en el sector, con la reapertura del segundo horno alto de Veriña el próximo 1 de septiembre.

Pese a que CCOO ha querido desligar desde un principio el avance en la negociación de este plan para las auxiliares de la decisión de reabrir el horno, en otros ámbitos se consideró clave, dado que ArcelorMittal pudo decirse por reactivar otra instalación similar de las varias que posee en Europa.

Paralelamente, continúa el proceso de incorporación de 127 trabajadores eventuales a la plantilla de la acería, al calor precisamente de la reapertura del segundo horno de Veriña.

Sin embargo, pese a estas incorporaciones, la empresa ha anunciado su intención de poner en práctica el Expediente de Regulación de Empleo (ERE), que afectará a casi 1.700 trabajadores de su plantilla en Asturias.