La resurrección de Estévez oculta los brotes verdes

Barcelona.-  La insospechada victoria de Reyes Estévez en 1.500 resucitó el fantasma de la última gran polémica del atletismo español, acaecida hace nueve años en el mismo estadio, y ocultó los "brotes verdes" que han cuajado en los campeonatos de España disputados en el Olímpico Lluis Companys.

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(EFE)

El corredor Reyes Estévez saluda tras imponerse en la final de los 1.500 metros, durante el Campeonato de España de Atletismo que se disputa este fin de semana en el Estadio Olímpico de Barcelona.

Nadie había contado con que Estévez, desaparecido en combate durante todo el año, compareciera justo el día en que cumplía 33 años para conquistar su cuarto título de 1.500 y poner en un brete al Comité Técnico de la Federación Española, que el jueves próximo anunciará un equipo de medio centenar de atletas para competir en los Mundiales de Berlín del 15 al 23 de agosto.

El nombre de Estévez, esté o no, finalmente, en la nómina, centrará la atención de todos los medios en la rueda de prensa del presidente José María Odriozola, quien recuerda muy bien -así lo confiesa- la polémica suscitada en los campeonatos de España del año 2000, en Barcelona como ahora.

Sucedió que un ambicioso Juan Carlos Higuero de 22 años consiguió el primero de sus cinco títulos al aire libre, mientras que Reyes Estévez, por entonces número uno español del 1.500 tras el declive de Fermín Cacho, tuvo un mal día en los campeonatos de España y la Federación le dejó fuera del equipo olímpico para Sydney.

Estévez nunca ha perdonado a Odriozola aquella exclusión y jamás podrá olvidar el golpe psicológico que sufrió.

Nueve años después el destino ha querido que el barcelonés se encuentre en la posición contraria. Ahora es él mismo quien puede dejar fuera a un atleta que ha sido superior a él durante todo el año con la sola excepción de la final de Barcelona.

En caso de que Estévez fuera seleccionado, todas las miradas apuntan a Diego Ruiz como el posible sacrificado. El burgalés, que ha sido este año subcampeón de Europa en sala y ha derrotado al barcelonés cuantas veces se han enfrentado, llegó quinto a la meta en el campeonato de España, por detrás de Estévez, Juan Carlos Higuero, Arturo Casado y Álvaro Rodríguez.

Para Odriozola, los campeonatos de España han tenido "un buen nivel medio y ninguna sorpresa", por lo que cabe deducir que el triunfo de Estévez entraba en sus combinaciones.

El estadio Olímpico, cuya pista mágica registró en los Juegos de 1992 el mayor éxito en la historia del atletismo español, confirmó que los "brotes verdes" nacidos en el último año en el viejo tronco del atletismo español no son flor de un día, y eso que faltaron a la cita barcelonesa, por lesión, algunos como Eusebio Cáceres (longitud) y Miguel Angel Sancho (altura).

Javier Cienfuegos, de 19 años, plusmarquista mundial júnior de martillo, logró su primer título absoluto; Kevin López (19), reciente campeón de Europa júnior de 800, sólo cedió ante su paisano Luis Alberto Marco; Jean Marie Okutu (20) logró su primer título de longitud y José Manuel Vila (23) fue subcampeón de jabalina poniendo en serios aprietos al veterano Gustavo Dacal.

Entre las chicas destaca, por su singularidad, el caso de Aauri Lorena Bokesa, la nueva campeona de España de 400, que juega al baloncesto con el Estudiantes durante toda la temporada (es internacional) y sólo cuando termina la liga se dedica al atletismo.

En un solo año de mínima dedicación al atletismo ha llevado a cabo una progresión espectacular que recuerda los pasos de Carlota Castrejana, otra jugadora de baloncesto internacional que llegó a ser campeona de Europa de triple salto en pista cubierta.

El periodo de pertinaz sequía en el atletismo español parece haber llegado a su fin, o al menos haber concedido una tregua, a juzgar por los recientes resultados de los campeonatos de Europa júnior y sub 23.

Los campeonatos nacionales confirmaron también el buen momento de algunos consagrados como Angel David Rodríguez, que hizo doblete en velocidad; Luis Alberto Marco y Mayte Martínez (800), Natalia Rodríguez y Nuria Fernández (1.500), Jesús España (5.000), Ruth Beitia (altura) y Mario Pestano (disco).

Si se añade el nombre de Marta Domínguez, que no compitió en Barcelona para descansar de su trepidante carrera de 3.000 m. obstáculos en la que una semana antes logró la mejor marca mundial del año en esa misma pista, España puede encarar con relativo optimismo los Mundiales de Berlín.