Los sindicatos apuntan a la Administración como garantía de cumplimiento del acuerdo

Santiago de Compostela.-  Los sindicatos Unións Agrarias (UUAA) y Xóvenes Agricultores (XXAA), junto con la Asociación Gallega de Cooperativas (AGACA), reconocieron hoy sus dudas sobre el cumplimiento del acuerdo firmado el pasado lunes, y señalaron que la Administración debe garantizar su implantación.

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(EFE)

Representantes de los sindicatos lácteos de Galicia (i-d) Hixínio Mougán de AGACA; Francisco Bello de Xóvenes Agricultores y Roberto García de Unions Agraria antes de la rueda de prensa que han celebrado esta mañana en Santiago de Compostela.

En una conferencia de prensa, los secretarios generales de UUAA, Roberto García, XXAA, Francisco Bello, y el gerente de AGACA, Higinio Mougán, coincidieron a la hora de calificar de "histórico" dicho pacto, pero matizaron que se trata de medidas orientadas a que el sector supere la crisis en la que se encuentra y que no solventa el hecho de que las explotaciones gallegas sean deficitarias.

Los representantes de las organizaciones agrarias señalaron que el precio indicado se sitúa por debajo de los costes de producción, por lo que reclamaron a la Xunta que apruebe con urgencia una línea de ayudas directas a las explotaciones.

Representantes de las organizaciones agrarias, cooperativas, industria y distribución firmaron el lunes un acuerdo, con vigencia hasta el 31 de diciembre, que recoge el compromiso de la industria de generalizar el sistema de contratos homologados, en el que el precio de la leche se fijará mediante un sistema de indexación.

Éste se negociará a través de la Interprofesional Láctea y tendrá como referencia el precio medio de la leche en Francia (0,28 céntimos), al que se sumará una prima por transporte que lo situará en 31 céntimos por litro.

Bello destacó la importancia de que "los ganaderos conozcan de antemano el precio de la leche", cuya media entre agosto y diciembre tiene que situarse en esos 31 céntimos, frente a una "situación anacrónica" en la que "a mes vencido, las industrias decían cuando, como y cuanto íbamos a cobrar".

"Se trata de un paso nunca dado antes", al que hay que otorgarle "un margen de confianza", añadió el representante de XXAA, quién advirtió a la industria de que "no hay excusas" para su incumplimiento.

Bello también hizo referencia a la necesidad de que las ayudas directas con las que ya cuentan los ganaderos de otras autonomías, se otorguen en Galicia en función de unos baremos "lo más amplios posible", puesto que "todas las explotaciones sufrieron la crisis".

Roberto García añadió que existen elementos en este acuerdo que lo "diferencian totalmente del pasado", entre los que subrayó que "la garantía que supone" que la supervisión de su cumplimiento recaiga en los Gobiernos central y autonómico, ya que son los que disponen de "los instrumentos coercitivos" para ello.

El representante de UUAA también hizo mención a los "ejemplares compromisos" aceptados por las distribuidoras, que asumieron la propuesta de diferenciar la leche española con un signo distintivo y la exigencia de condicionar el abastecimiento a la firma de los contratos homologados por parte la industria.

"Éste es un acuerdo histórico por la forma, no por la cuantía", matizó García, quien lo definió como "la única alternativa posible", frente a los que -en referencia al Sindicato Labrego, que no firmó este acuerdo- "se sientan en el vallado para apuntarse si las cosas salen bien y culpar a otros si salen mal".

El secretario general de UUAA recordó que "hace dos semanas estábamos denunciando que a muchos ganaderos les compraban la leche a 18 céntimos", quien puntualizó que el precio de 31 céntimos "no cubre costes, pero es el más alto de Europa".

Mougán añadió que se trata de un acuerdo de "supervivencia" y "realmente interesante", pese a que les gustaría que recogiese un precio mínimo obligatorio y no indicativo, pero matizó que las leyes europeas de competencia no hubiesen permitido su incorporación en el citado acuerdo.

Por otra parte, el gerente de Agaca también reconoció su "escepticismo" de cara al cumplimiento de los pactado en Madrid, ya que "no existen muchas experiencias de acuerdos que se mantengan en este país", por lo que instó a los Gobiernos centrales y autonómicos a actuar como "garantes" de que dicho pacto "no es una firma más".