Lara: "Hay una pandemia de muertes prematuras de intelectuales catalanes"

Barcelona.-  El presidente del Grupo Planeta, José Manuel Lara, cree que existe "una pandemia, no sólo de gripe, sino de muertes prematuras de intelectuales catalanes, que no produce ninguna satisfacción", en referencia a la desaparición de Baltasar Porcel, pero también de Terenci Moix o Manuel Vázquez Montalbán.

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(EFE)

La capilla ardiente del escritor mallorquín Baltasar Porcel quedó instalada esta mañana en el Palau Moja de Barcelona para que todos los ciudadanos que lo deseen le rindan su último homenaje.

Tras dar el pésame a la familia de Porcel, fallecido el miércoles a los 72 años, Lara Bosch se ha mostrado hoy preocupado por la desaparición "de aquellos que son de tu generación" y ha deseado que "no tengamos más mala suerte".

Amigo personal de Porcel desde hace más de cuarenta años, Lara ha recordado, a preguntas de los periodistas, que el escritor mallorquín había empezado en Planeta como editor de guías turísticas y, posteriormente, estuvo al frente de una colección de Literatura de Grandes Narradores, en la que editó por primera vez en España a autores como Juan Rulfo y Ernesto Sábato.

"Hemos sido conspiradores intelectuales -ha proseguido- y hoy me falta un amigo, un admirado intelectual y un colaborador histórico de la editorial".

José Manuel Lara Bosch ha sido una de las más de 600 personas que durante la mañana de hoy y hasta las dos de la tarde habían acudido hasta la capilla ardiente de Baltasar Porcel, instalada en la Sala del Vigatà del Palau Moja de Barcelona, junto a las céntricas Ramblas.

Numerosos escritores y personas del ámbito de la Cultura han querido decir el último adiós al escritor, considerado como uno de los más grandes de la Literatura catalana del último cuarto de siglo.

El presidente del Consejo Nacional de la Cultura y de las Artes, Xavier Bru de Sala, ha mantenido que con su obra ha contribuido "a configurar la textura de su tiempo y a marcar caminos por los que debe ir una sociedad" y ha agregado que "en la novela catalana habrá un antes y un después de Baltasar Porcel".

Sin embargo, duda de que en su vertiente como articulista "tenga el mismo reconocimiento, porque somos una sociedad de tribus, que tolera mal a sus grandes figuras".

El editor Josep Maria Castellet ha sostenido que de Porcel "quedará su vitalidad tremenda" y ha resaltado "su sobreesfuerzo para solidificar el catalán y dejarlo para las generaciones siguientes".

La cantante Maria del Mar Bonet ha rememorado sus primeros contactos con el autor de Andratx (Mallorca), su amistad a lo largo de los años y su "gran vitalidad, que no se ha apagado hasta ahora, lo que nos hará mucha falta".

Escritores como Sebastià Serrano, Jaume Cabré, Àlex Susanna, Oriol Izquierdo, Jordi Coca, Miquel de Palol, Marta Pessarrodona, Carles Duarte, Héctor López-Bofill, Sebastià Alzamora, Maria Carme Roca, o el presidente de Òmnium Cultural, Jordi Porta, y la abogada Magda Oranich son algunas de las personas que han dado su pésame a la familia de Porcel en el Palau Moja.

Además, un goteo de lectores, personas anónimas, de una cierta edad, algunas de ellas muy emocionadas, han querido rendir su personal homenaje a Porcel.

Alguna de ellas no ha podido contener las lágrimas; otra ha pedido una calle en Barcelona con su nombre, y la mayoría ha estampado sus pensamientos en los libros de firmas que se han colocado en uno de los pasillos del Palau Moja. "Nos enseñaste a amar el Mediterráneo y la literatura en general", "Baltasar, tu obra siempre quedará viva" o "Disfruta de la inmortalidad! Adiós, maestro sublime", son algunas de estas sentencias.

Otro testimonio curioso lo ha ofrecido un exiliado croata en Cataluña, quien ha querido desplazarse hasta el Palau Moja para despedirse de Porcel, a quien conoció en los años noventa en un debate en la radio sobre el conflicto de los Balcanes, junto con una mujer serbia. "Al salir, el escritor me dijo que tenía toda la razón en mis argumentaciones", ha señalado.