Juzgan a 4 funcionarios de Martutene por acosar a un compañero homosexual

San Sebastián.-  Cuatro funcionarios de la prisión de Martutene serán juzgados después del verano en San Sebastián a raíz de una denuncia formulada por uno de sus compañeros que los acusa de haberle sometido a una situación de "acoso permanente" desde el año 1997 por su condición de homosexual.

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(EFE)

Un coche de Policía durante un suceso. EFE/Archivo V

Se da la circunstancia de que la Fiscalía de Guipúzcoa no ha presentado acusación por este caso, al entender que contra los imputados "no existe prueba alguna más allá de las manifestaciones del denunciante".

Según el escrito de acusación de la presunta víctima, al que hoy ha tenido acceso Efe, los hechos se remontan a 1997, año desde el que el funcionario homosexual sufre supuestamente "burlas, insultos y bromas más que pesadas" en una situación de "acoso permanente, desprestigio profesional y trato degradante por parte de varios compañeros de trabajo".

El documento indica que "el acoso al que es sometido tiene siempre un claro componente de tipo sexual", ya que "las humillaciones hacen referencia" a su condición homosexual.

El texto aclara que este supuesto acoso "se produce de forma reiterada, continuada y permanente" por parte de varios compañeros que "actúan de común acuerdo", lo que ha originado al perjudicado "un trastorno mixto de ansiedad y depresión" desde hace unos años, que en ocasiones le obliga a estar "fuertemente medicado".

Según el escrito, la víctima tiene diagnosticado un "cuadro clínico de ansiedad y depresión que se prolonga durante años, motivado por vivencias de malos tratos en su lugar de trabajo".

El documento de la acusación particular incluye una referencia a unas supuestas manifestaciones de un ex director de Martutene, quien en 2007 habría admitido "la existencia de un tono generalizado y continuo de desprecio" por parte de los denunciados, quienes además "se animaban unos a otros para que esto fuera así".

La acusación particular considera que estos hechos son constitutivos de un delito contra la integridad moral con la circunstancia agravante de haber sido presuntamente cometido "por discriminación referente a la orientación sexual" y "aprovechando las circunstancias de lugar, tiempo o auxilio de otras" personas, para debilitar "la defensa del ofendido" y facilitar "la impunidad del delincuente".

Por este motivo, reclama que se imponga una pena de dos años a cada uno de los cuatro acusados, y que, en caso de ser condenados, indemnicen solidariamente a la víctima con 45.000 euros "por los años de tratos degradantes ocasionados y las secuelas causadas".

La Fiscalía, sin embargo, no ha presentado acusación por estos hechos, al entender que el relato que el denunciante hace del supuesto acoso es "confuso" e incluye a "prácticamente a casi todos los funcionarios que coincidieron con él en Martutene".

Recuerda también, en un documento al que ha tenido acceso Efe, que los testigos que han declarado hasta ahora "nunca presenciaron tratos despectivos, injuriosos ni humillantes", mientras que el denunciante "se limita a hablar de persecución e insultos, pero no señala fechas, situaciones, palabras concretas o testigos".

La Fiscalía expresa además su sorpresa por el hecho de que, "diez años después de iniciado el supuesto acoso, -la víctima- siga trabajando en el mismo centro penitenciario, donde supuestamente se inició el acoso, teniendo posibilidad" de una "total movilidad" en su calidad de funcionario de prisiones.

"También extraña que, habiéndose trasladado el 23 de junio de 2002 a la prisión de Villena, donde según declaró se encontraba muy bien, al cabo de un año vuelva al lugar donde se siente perseguido", concluye el Ministerio Público.