El primer ministro peruano afronta una posible censura por la violencia en la Amazonía

Lima.-  El presidente del Consejo de Ministros de Perú, Yehude Simon, afrontará mañana una interpelación en el Congreso de la República que puede desencadenar en su censura y la caída del gabinete.

Simon ha sido citado, junto con la ministra del Interior, Mercedes Cabanillas, para que se presente en el hemiciclo del pleno legislativo a partir de las 09.00 horas (14.00 GMT).

La sesión busca que los ministros respondan por los violentos sucesos que ocurrieron en la región Amazonas el pasado 5 de junio, cuando un operativo policial, que pretendía desalojar a los indígenas que habían tomado una carretera, terminó con la muerte de 24 agentes y 10 civiles.

Los indígenas amazónicos llevaban más de un mes en protestas por el rechazo a un paquete de leyes que consideraban perjudiciales a sus derechos y exigían su derogatoria, un pedido que fue aceptado la semana pasada por el Gobierno, que se disculpó por no haber consultado a los nativos antes de emitir los decretos.

Las normas derogadas formaban parte de un paquete elaborado por el Ejecutivo para adecuar su legislación a los pedidos de Estados Unidos en materia de protección forestal y medioambiental, tras la firma de un Tratado de Libre Comercio (TLC) entre ambas naciones.

Después de las violentas protestas, Simon anunció su intención de dejar el cargo en las próximas semanas, aunque luego el presidente peruano, Alan García, le ratificó su confianza.

Los analistas consideran, sin embargo, que el Gobierno de García, que cumplirá tres años el próximo 28 de julio, salió debilitado de la crisis, tras verse forzado a derogar las leyes y con la necesidad inminente de remodelar el gabinete.

El efecto de esta crisis se vio reflejado en una caída en la popularidad de García, quien perdió nueve puntos en su aprobación a nivel nacional desde mayo pasado y bajó a 21 por ciento este mes.

El Gobierno recibió, además, muchas críticas por haber acusado en un primer momento a los indígenas de "extremistas" y "salvajes", entre otros términos que el propio Simon aceptó como parte de los errores en el manejo de las protestas.

En medio de la crisis, se presentó la renuncia de Carmen Vildoso al ministerio de la Mujer, en rechazó el tratamiento dado por el Gobierno a los nativos.

Simon ha mantenido en los últimos días un maratón de visitas a ciudades del interior del país, con la intención de desactivar una serie de protestas sociales que amenazan con volver a encender la mecha del conflicto social.

Esta gestión permitió llegar el martes a un acuerdo para que las comunidades campesinas de la región sureña de Apurímac suspendieran sus protestas hasta septiembre próximo, a la espera de que el Gobierno cumpla con una serie de promesas, entre las que figura la construcción de una carretera.

Su presentación de mañana estará, sin embargo, teñida por la expectativa de un pedido de censura que ha sido anunciado por la fujimorista Alianza por el Futuro y por el Partido Nacionalista Peruano.

El gobernante Partido Aprista Peruano (PAP) ha señalado, sin embargo, que defenderá al jefe del gabinete, mientras que la alianza conservadora Unidad Nacional escuchará sus argumentos antes de decidir su voto.

El Congreso decidió ampliar la segunda legislatura ordinaria, que debía concluir el 30 de junio, hasta el 3 de julio para poder debatir las mociones de censura que se presenten después de la interpelación.