Barroso presentará un programa basado en "más ambición" para Europa

Bruselas.-  El presidente de la Comisión Europea, el portugués José Manuel Durão Barroso, presentará esta noche a los líderes de la UE un programa de gobierno para los próximos cinco años basado en "más ambición" y una Europa responsable y capaz de actuar.

Barroso, único candidato por ahora a la presidencia del futuro Ejecutivo comunitario, defenderá sus méritos y propuestas ante los veintisiete gobernantes durante la cena que estos celebrarán en Bruselas.

La cumbre que hoy comienza debe iniciar el proceso de renovación de la Comisión Europea, la institución clave de la UE que impulsa y gestiona las políticas comunes.

El político portugués cuenta para la reelección con el apoyo mayoritario de los gobiernos de la UE, y el reciente triunfo de su familia política -los conservadores del PPE- en las elecciones al Parlamento Europeo ha reforzado sus aspiraciones.

En una carta dirigida a los Veintisiete, Durão Barroso anticipa lo que será su programa para los próximos cinco años, si finalmente es aceptado hoy por el Consejo Europeo y respaldado en las próximas semanas por el Parlamento Europeo.

"Creo que en tiempos de crisis necesitamos más que nunca una Unión Europea fuerte y una Comisión Europea fuerte. Necesitamos más, no menos Europa", afirma el presidente de la CE en la carta difundida a los medios.

"Necesitamos una Europa que se centre en aquello en lo puede aportar valor añadido. Eso es lo que los ciudadanos esperan de nosotros. Tenemos que ser claros: es el momento de aumentar nuestras ambiciones europeas, no de disminuirlas".

Barroso insiste también en que ahora más que nunca "es el momento de la acción". "El mundo no va a esperar a Europa", advierte.

En su concepción, la UE debería "colocar las oportunidades, la responsabilidad y la solidaridad en el corazón de la economía social de mercado".

Defiende una Europa "que invierta en su futuro", modernizando sus infraestructuras, y "comprometida con una transformación radical hacia una sociedad basada en el conocimiento".

Igualmente debe ser Europa la que "conduzca a nuestras economías fuera de la crisis" y la que siente la base de un crecimiento "más verde, inteligente y sostenible, promoviendo la cohesión económica y social y asegurando la sostenibilidad fiscal a largo plazo".

Barroso quiere en especial que la UE "conserve el liderazgo mundial en la lucha contra el cambio climático".

Se refiere igualmente a la necesidad de "rechazar todas las formas de proteccionismo económico", aunque se declara decidido a "proteger y promover los intereses europeos en todo el mundo".

Finalmente, la Europa que él defiende debería "seguir liderando el camino hacia una regulación y supervisión efectivas de los mercados financieros globales".

Los europeos, según Barroso, tienen que dar forma a la globalización con los valores que les son propios, de manera que se respeten los principios éticos y se promuevan a nivel mundial los más altos estándares sociales y medioambientales.

La UE tiene que ser "la campeona en la promoción de los derechos humanos y el desarrollo" y debe "hablar alto y claro, con una sola voz, en la escena mundial".