Brasil está cansada

Pretoria (Sudáfrica).-  El cansancio es el principal problema de la selección brasileña, que ha llegado a esta altura de la temporada con las baterías descargadas y sin más fuerzas que las justas para realizar "pijama trainings" (entrenamientos en pijama), como definió el doctor Jose Luiz Runco al actual trabajo del equipo.

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(EFE)

El jugador de la selección brasileña de fútbol Robinho se ejercita durante el entrenamiento que el equipo llevó a cabo ayer en el Super Stadium de Atteridgeville, Pretoria, Sudáfrica.

Runco afirmó que este tipo de preparación, necesaria en el tramo final de las temporadas, se reduce a un trabajo de mantenimiento destinado, básicamente, a que el jugador descanse y se alimente bien para que tengan las fuerzas necesarias para poder rendir en los partidos.

El agotamiento de los jugadores, el cansancio muscular, el esfuerzo en los recientes partidos de las eliminatorias para el Mundial de 2010, las cinco horas de diferencia entre Sudáfrica y Brasil, la adaptación metabólica a una nueva situación o el control del sueño han marcado el inicio de participación de Brasil en la Copa de las Confederaciones.

El pasado lunes, en Bloemfontein, Brasil obtuvo una victoria agónica ante Egipto por 4-3 gracias a un gol logrado de penalti por Kaká en el minuto 90 de partido.

Aunque la selección brasileña mantuvo el control del juego durante el primer tiempo y llegó al descanso con ventaja por 3-1, en la segunda parte el equipo egipcio impuso su ley a nivel táctico, estratégico y, sobre todo, físico, para empatar el encuentro e, incluso, estar a punto de ganarlo, aunque finalmente no lo logró.

Esta circunstancia abrió un debate en torno al cansancio de la selección y propició una comparecencia pública de los médicos del equipo José Luis Runco y Serafín Borges, para matizar los detalles del momento que vive la selección.

Con el propio seleccionador, Carlos Verri, "Dunga", como asistente a la rueda de prensa de los doctores, éstos dejaron claro que no ha habido tiempo para preparar esta competición.

Runco recordó que Brasil está desde el 6 de junio en una etapa de competición oficial y, por tanto, no se había podido realizar ningún tipo de preparación específica para la competición, ya que se había medido a Uruguay y Paraguay en partidos de clasificación para el Mundial.

"Las energías están justas y se trabaja exclusivamente para poder superar los partidos", explicó el médico de la selección brasileña, quien realiza un trabajo particular para recuperar a los futbolistas del cansancio muscular que padecen.

"Se altera hasta el ritmo de las necesidades fisiológicas e incluso el sueño y por ello hay que reforzar al jugador con algunos complejos vitamínicos y el 'pijama training'", dijo Runco.

En este sentido, reconoció que los jugadores que más problemas tenían eran los defensores Maicon, que no jugó ante Egipto, y Juan, que actuó los noventa minutos y marcó un gol. "Esto no quiere decir que estén lesionados. Tienen problemas, pero pueden mejorar", insistió.

La comparecencia del cuerpo médico de la selección junto a Dunga y otros integrantes de la delegación, contó con la presencia de Jorge Aormim, "Jorginho", segundo entrenador de la selección.

Éste señaló que el asunto ha provocado conversaciones con algunos los futbolistas sobre su estado físico y que estudiarán algún cambio de cara al encuentro ante Estados Unidos.

Otro de los factores que se planteó como posible causa de las dificultades de algunos jugadores de Brasil en estos momentos, fue la preocupación por el futuro deportivo a partir de la próxima temporada.

En este sentido, Jorginho reconoció que existe una realidad económica en torno a los profesionales que no se puede negar, pero señaló que los futbolistas saben perfectamente que cuando están en una competición "todo gira en torno al fútbol" y no sobre otras cuestiones en las que habrá que pensar más tarde.

El defensa Juan también admitió está situación y, en su caso personal, aludió a la intensidad y las lesiones de la temporada con su actual club, el Roma, aunque no descartó la posibilidad de poder jugar contra Estados Unidos.

"Ha habido desgaste, dolores musculares, dificultades para llegar a algunos balones, para recuperarme y para dormir", señaló Juan, quien al igual que toda la delegación, espera que el equipo mejore su rendimiento a partir del encuentro contra Estados Unidos.