La Fura del Baus secuestra en León el último teatro español

León.-  La Fura del Baus concluye hoy en León su "secuestro" de los teatros españoles, con la obra Boris Godunov, basada en la acción de un comando terrorista en el que el actor Manel Sans representa la facción más violenta.

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(EFE)

El actor de la compañía Fura dels Baus Pedro Gutiérrez, sentado en el teatro Arriaga de Bilbao el pasado 3 de junio. EFE/Archivo

"Yo busco sangre", ha asegurado a Efe Sans en una entrevista, en la que ha asegurado que "si el espectador se rebota tiene todas las de ganar".

La gira española empezó en marzo de 2008 y concluye hoy en León para proseguir por el extranjero, y tras recorrer Taiwán Portugal, Alemania e Italia se dirige a Grecia y a México, según ha explicado el actor catalán en declaraciones a Efe.

Con esta obra, La Fura del Baus involucra al público en la trama, inspirada en el secuestro del teatro Dubrovka de Moscú en 2002, y aunque la intención es que el espectador reflexione y tome partida "de una forma mental y no física", la realidad es que durante más de un año de representaciones el pánico se ha hecho dueño de alguno de los asistentes.

Gritos, reivindicaciones nacionalistas e incluso espectadores aterrorizados que salían corriendo del teatro son algunas de las reacciones de este publico al que secuestran y vive en primera persona "aquél momento en el que las ideas se tuercen y conducen a la criminalidad".

Se pretende que el público tenga una visión "infinitesimal" de lo que pudo sufrir un secuestrado en el teatro ruso y el resultado es que "el cincuenta por ciento te dirán que lo han que lo han pasado mal" y la otra mitad "que ha estado tranquilo".

El actor ha explicado que ante la imposibilidad de mover a una masa su función es la de aportar un granito de arena contra la dinámica terrorista, a través de "un grito al civil, para que despierte y reflexione acerca de las manos en las que está".

Un fin que al menos durante la función se logra, ya que Sans ha asegurado que en muchas ocasiones ha apreciado como el espectador "tiene su mente en los hechos reales", y observa la función con un "respecto sagrado, ya que en la vida real el secuestro acabó con la vida de más de 200 personas".

Al principio ese traslado mental del espectador sorprendía a los actores porque veían a "un público distanciado", pero después "hemos comprendido" que en realidad está procediendo a diseñar su propia "composición mental" de los hechos.

"En los aplausos se aprecia que les ha impactado" y puede se observar en sus ojos "la comprensión de lo absurdo que resulta pagar con la sangre de un civil la lucha de otros por el poder", ha añadido.

En esa composición mental, Sans es el encargado de interpretar la facción más violenta con un personaje que es de los más terroríficos, pero que por su "frivolidad" es también aquél "con quien te ríes o te irías a tomar una cerveza".

En el extranjero, la obra, les ha llevado hasta un público "intelectual" alemán, ante la memoria aún presente en Taiwan del "fantasma de China", o a una Italia entregada con la compañía que acude con "generosidad" a cada una de sus representaciones.

Tras finalizar hoy en León su gira española se embarcarán rumbo a Atenas, donde ofrecerán desde el próximo 24 de junio cinco representaciones.

Después cruzarán el charco hasta México, donde proseguirán con su particular denuncia del terror, un tema "universal y cercano", puesto que "todo el mundo tiene una pesadilla un miedo o a sufrido una situación de violencia", ha concluido Sans.