Moreno comenta con sarcasmo en su obra lo que dicen escritores y críticos

Pamplona.-  El navarro Víctor Moreno ha presentado hoy en la feria del libro de Pamplona la obra "Fuera de lugar", en la que recoge el fruto de una recopilación y una reflexión "con sarcasmo", realizada durante casi veinte años, sobre artículos y citas de escritores y críticos.

Mediante esta reflexión de dos décadas, ha dicho en rueda de prensa, se expone su propia teoría sobre la literatura, la lectura y la escritura.

Moreno, durante la presentación de su obra "Fuera de lugar. Lo que hay que leer de críticos y escritores", ha indicado que para escribirla ha realizado "una tarea de termita" y ha apuntado que no ha querido hacer un libro "desde el punto de vista sesudo" sino que pretende recalcar que quienes escriben deben exigirse ser rigurosos, y fundamentar lo que dicen.

Cuando la cita se suele tomar a "pitorreo", como hace en su libro, sus protagonistas suelen apelar al contexto, ha afirmado Moreno, quien ha subrayado que "nadie asume la responsabilidad de sus actos", aunque a su juicio las palabras que uno dice "son 'actos de habla' que pueden tomarse como actos punibles".

Además, ha comentado que, como decía Baudelaire, hay dos modos de enfrentarse a los libros: en línea curva, que considera que se produce cuando se dan rodeos y no se pone nombres detrás de los "desaguisados" que se presentan; y la línea recta, que es la "difícil" que supone asumir las responsabilidades.

Moreno ha considerado que el suyo es un libro "serio" ante "una situación gravísima en el panorama actual".

"El libro plantea que las relaciones entre lenguaje y pensamiento son complejas, pero al mismo tiempo son muy divertidas", ha declarado el escritor, quien ha añadido que "donde realmente hay vejación del pensamiento, el lenguaje nos las hace pasar canutas",

"Cuando no hay pensamiento", ha agregado, "no domina el lenguaje, y entonces éste es el que suelta lo que le viene, y así el mundo hoy día del pensamiento es la banalidad, es la confusión, se sustituyen las ideas por ocurrencias, y lo hacen tanto los críticos como los escritores".

Además, ha indicado que los llamados "actos de habla" en la actualidad "pasan y pasan, y hay gente que se los cree", aunque, en todo caso, ha resaltado que él no es juez, sino que se limita a ridiculizarlos: "me los paso por el arco de la risa y del sarcasmo".

Moreno ha incidido en que muchas frases de las que se recogen en la obra las dicen los críticos y escritores en "sus horas bajas", ya que "si dicen lo que piensan, mal", pero si "piensan lo que dicen, habría que deducir que no piensan".

También ha aseverado que, del 60% de la población que se considera lectora, aproximadamente el 55% leen "best-sellers", por lo que los modelos de lectores "están bajando el listón", a lo que se suma el problema de que en España "no existe ninguna entidad educativa que enseñe a escribir".

La gente aprende de forma "autodidacta", según Moreno, quien ha añadido que esto es "fuente de inseguridad" ya que "siempre se busca a un interlocutor válido que diga si está bien o no".

Ha considerado igualmente que los alumnos que han recibido una formación tanto en institutos como en la universidad "son analfabetos funcionales" desde el punto de vista de la escritura y ha apuntado que, quienes tienen a una persona que les orienta sobre la calidad de lo que han escrito, "son unos privilegiados".

Por último, Moreno ha incidido en que "la sociedad actual tiende a sacralizar al escritor", porque se cree que son producto del "geniotipo".