El Parlament rechaza que el catalán sea un mérito y no un requisito en la sanidad

Palma.-  El pleno del Parlament ha rechazado hoy que el catalán se contemple como un mérito y no como un requisito para acceder a un puesto de trabajo en la sanidad pública balear, después de que tras realizar tres votaciones consecutivas el resultado haya sido siempre empate a 26 votos.

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(EFE)

El pleno del Parlament ha rechazado hoy que el catalán se contemple como un mérito y no como un requisito para acceder a un puesto de trabajo en la sanidad pública balear. EFE/Archivo

Los populares, defensores de que el catalán no debe ser "impuesto", en concreto a los profesionales de la sanidad -apelando a la escasez de especialistas y enfermeras que padecen las islas-, han planteado una proposición no de ley para que en la Oferta Pública de Empleo (OPE) el saber catalán no sea una exigencia.

A juicio del diputado popular Francesc Fiol, encargado de defender la proposición en ausencia de Aina Castillo -consellera de Salud en la anterior legislatura-, "lo que se espera (de los profesionales sanitarios) es que curen a las personas y den los estándares de calidad", no que hablen determinada lengua.

Esta propuesta del PP, que ha obtenido como único respaldo el del diputado de la Agrupación de Independientes de Formentera (AIPF), Josep Maria Mayans, ha recabado -además del rechazo parlamentario- duras críticas desde las filas del resto de formaciones que integran la Cámara, quienes han tildado a los populares de hipócritas y manipuladores.

El grupo mixto (tanto Eivissa pel Canvi como UM), el Bloc y el PSIB-PSOE han coincidido en denunciar que con esta propuesta el PP niega la condición de lengua oficial de las islas al catalán y que, además, va contra las leyes estatales y autonómicas.

"¿Desde cuándo es un mérito y no un requisito ejercer bien la función pública?", ha preguntado en este sentido la diputada de Eivissa pel Canvi, Esperança Marí, quien ha acusado a los populares de entrar en una "contradicción flagrante" al presentar esta propuesta no de ley al pleno del Parlament balear.

El portavoz de UM, Josep Melià, ha ido más allá y ha acusado al PP de "manipulación, contradicción y cambio de postura" respecto de la lengua catalana, al recordarle al partido que preside Rosa Estarás que ahora van contra una normativa que ellos mismos aprobaron.

"Los únicos que hablan de imposición de la lengua son ustedes, ninguno de los demás lo hacemos", ha recriminado Melià al PP y ha añadido que incluso "más importante que se atendido en catalán, es el ser entendido", sobre todo si se está hablando de sanidad.

En la misma línea se ha pronunciado el diputado del Bloc, Eduard Riudavets, quien ha reprochado al PP sus "mentiras", "sus falacias" y sus "medias verdades con las que pretenden confundir a la ciudadanía".

La propuesta de hoy es, a juicio de Riudaverts, un "ejemplo paradigmático de cómo retorcer la realidad para usarla políticamente con fines partidistas". "El PP no hace otra cosa que crear problemas, hoy por hoy el PP es parte del problema y, en muchos casos, son el problema", ha insistido el diputado del Bloc.

Los socialistas, en boca del diputado Ernest Ribalaiga, se han limitado a señalar que los argumentos expresados por Fiol "caen por su propio peso" dado que la política de normalización lingüística que lleva a cabo el Govern es, según el PSIB, "sensata y conciliadora" y ha recordado la exención temporal que incluye el decreto sanitario para que aprendan el idioma.

En respuesta a estos reproches e "insultos", Fiol ha recordado a sus compañeros de Cámara que "el PP no los acepta porque ustedes no tienen ninguna legitimidad" para "insultar" a los populares ni para acusarlos de manipuladores y tergiversadores.

"Incluso nos han acusado de prevaricar en el Parlament, se nos acusa de que hemos propuesto al Parlament un delito", ha subrayado Fiol, quien ha concluido que a él no le dan "miedo" el resto de grupos, aunque sí le "asombra" su "fundamentalismo".

El pleno del Parlament, por otra parte, también ha debatido hoy una moción de los populares referente a la política del Govern en materia de Cultura, derivada de una interpelación anterior, y que también ha sido rechazada.

Todos los grupos, excepto el PP, han coincidido en señalar que lo que se solicitaba en ella está ya en marcha, como un plan para solucionar los problemas de espacio del conservatorio de música, el desarrollo de la ley de bibliotecas e instar al Estado a que empiecen las obras de la Biblioteca Central de Ibiza.