Morales acusa a García de proteger a delincuentes y de provocar a Bolivia

La Paz.-  El presidente de Bolivia, Evo Morales, acusó hoy a su colega peruano, Alan García, de "proteger a delincuentes", lo comparó con el ex gobernante de EE.UU. George W. Bush y dijo que su actitud "es una abierta provocación" a su país.

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(EFE)

Morales volvió a criticar a Alan García por asilar en Perú al ex ministro boliviano Jorge Torres Obleas, uno de los acusados por su supuesta responsabilidad en las 60 muertes que provocó la represión militar de octubre de 2003. EFE/Archivo

Morales volvió a criticar hoy a Alan García por asilar en Perú al ex ministro boliviano Jorge Torres Obleas, que junto al ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada y varios miembros de su segundo Gobierno están acusados por su supuesta responsabilidad en las 60 muertes que provocó la represión militar de octubre de 2003.

"Antes, los delincuentes se escapaban a Estados Unidos cuando George Bush estaba de presidente, ahora los delincuentes se escapan al Perú, porque el presidente peruano protege a estos delincuentes", afirmó Morales en una conferencia de prensa en La Paz con corresponsales extranjeros.

Agregó que lo "que está haciendo Alan García es una abierta provocación al pueblo boliviano y al Gobierno Nacional", tras insistir en que Perú está incumpliendo normas internacionales y sus propias leyes nacionales sobre asilo y refugio.

"Quiero hacerle un pedido (a García) de presidente a presidente: que deje de proteger a los delincuentes, que deje de ser el presidente Bush en los EE.UU., que respete las normas y fundamentalmente los derechos humanos", reclamó el gobernante boliviano que volvió a llamar "chabacano" a su homólogo de Perú.

El próximo 18 de mayo se iniciará en la ciudad de Sucre (sur) el juicio para determinar las responsabilidades por la masacre ocurrida en el llamado "octubre negro" de 2003, durante el segundo Gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada (1993-1997 y 2002-2003).

La Fiscalía acusa al ex presidente y a varios de sus ministros de ese "genocidio", por autorizar la represión a varias protestas sociales, lo que causó más 60 muertes en las ciudades de La Paz y El Alto.

Este juicio comenzará con muchos de los imputados fuera de Bolivia, entre ellos Sánchez de Lozada que, en medio de aquel conflicto, abandonó el país y se instaló en Estados Unidos, donde reside desde entonces.

En Estados Unidos también se encuentran los ex ministros de Defensa Carlos Sánchez Berzain y de Hidrocarburos Jorge Berindoague.

El fiscal encargado de este caso, Milton Mendoza, pidió el domingo a la Corte Suprema de Justicia que recurra a la Interpol para establecer el paradero de los imputados que salieron del país.

"Lo que debe hacer la Corte Suprema de Justicia, a pedido nuestro, es declarar rebeldes ante la ley, y prófugos de la justicia boliviana", afirmó el fiscal al recordar que a principios de mes solicitó a ese órgano judicial medidas cautelares, para que los implicados no huyeran del país.

En los últimos meses han salido de Bolivia los ex ministros de Gobierno (Interior) Yerko Kukoc, de Agricultura Guido Áñez y de Educación Hugo Carvajal.

Además, el Gobierno de Perú decidió conceder asilo al ex ministro de Desarrollo Económico Jorge Torres Obleas y estudia los casos de Javier Torres Goitia (Salud) y Mirtha Quevedo (Participación Popular), que también están en el país vecino.

En su comparecencia informativa, Morales aprovechó para responsabilizar a la Corte Suprema boliviana de no haber emitido las medidas cautelares, ni atendido las peticiones de prisión preventiva efectuadas desde la Fiscalía para impedir esta situación.

Por ello, se mostró partidario de que los miembros de la Corte Suprema sean enjuiciados por la dilación del juicio y por no haber evitado la huida de los imputados.

La legislación boliviana no permite "juzgar en ausencia", de manera que el proceso sobre la matanza del "octubre negro" comenzará con los ex ministros y oficiales militares que se encuentran en el país.