Las autoridades mexicanas reducen a 8 los muertos confirmados por la nueva gripe

CIUDAD DE MÉXICO.-  Los laboratorios ya han procesado 1.105 pruebas moleculares para comprobar posibles casos de gripe A (H1N1) en México, lo que ha provocado una sorpresiva reducción de los casos sospechosos de esta enfermedad que terminaron en muerte. De los 176 que se barajaban ayer, la cifra ya se ha reducido a 101, de los que sólo 8 son casos confirmados de fallecimiento por la nueva gripe. Mientras, la OMS informó hoy de un total de 615 infectados en quince países de todo el mundo, un lista a la que se incorporan hoy Italia.

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Reuters (EUROPA PRESS)

Los laboratorios ya han procesado 1.105 pruebas moleculares para comprobar posibles casos de gripe A (H1N1) en México, lo que ha provocado una sorpresiva reducción de los casos sospechosos de esta enfermedad que terminaron en muerte. De los 176 que se barajaban ayer, la cifra ya se ha reducido a 101, de los que sólo 8 son casos confirmados de fallecimiento por la nueva gripe. Mientras, la OMS informó hoy de un total de 615 infectados en quince países de todo el mundo, un lista a la que se incorporan hoy Italia.

El secretario (ministro) de Salud mexicano, José Ángel Córdova, informó de que hasta ayer por la noche de las 1.105 pruebas analíticas procesadas, 443 de ellas han dado positivo por gripe A (H1N1). De las 16 personas que hasta ahora se barajaban como casos confirmados de muerte por nueva gripe, ocho de ellas han dado una analítica positiva, mientras que seis son negativas y las de las otras dos personas han dado un resultado dudoso, por lo que se repetirán los análisis, informó Córdova.

Sin embargo, Córdova indicó que aún sería prematuro decir que se ha superado el momento más difícil, pero sí afirmó que se ha entrado en una etapa de estabilización teniendo en cuenta datos como el bajo índice de contagio o la persistencia o incluso disminución de los niveles de ingresos en los hospitales.

Dentro de los estudios que se realizan diariamente se registraron 135 casos de gripe estacional, que no son positivos para el virus A (H1N1).

Mientras, siguen los esfuerzos de las autoridades por controlar el contagio de la epidemia en los que se encuadra el reparto de ayuda enviada desde España. Hoy mismo se ha recibido el envío de 63.000 mascarillas y 6.000 gafas y otro material sanitario y de prevención cuya distribución comenzó de inmediato a cargo del Ejército mexicano.

Los datos divulgados desde México DF no concuerdan aún con los publicados por la OMS, menos actualizados, pero sí son útiles para evaluar el alcance de la epidemia más de una semana después de que saltaran a los medios de comunicación los primeros casos.

658 CASOS EN 16 PAÍSES

El informe oficial recoge hasta el momento 658 casos en 16 países, la mayoría en México y Estados Unidos, únicos países en los que se han registrado muertes de personas infectadas por el virus. En cuanto a las medidas, la OMS sigue sin recomendar restricción alguna a los desplazamientos, pero sí insta a quienes tengan síntomas gripales tras realizar un viaje internacional se presenten ante las autoridades sanitarias.

Según la agencia sanitaria de la ONU, no hay datos que indiquen un contagio sostenido fuera de Norteamérica. Esta condición es indispensable para plantear un posible incremento del nivel de alerta por pandemia, explicó el director de Alerta y Respuesta Global, Michael Ryan.

"No tenemos prueba de un contagio sostenido en comunidades fuera de Norteamérica", afirmó Ryan en rueda de prensa desde la sede central de la OMS en Ginebra. En estos momentos, el nivel de alerta por pandemia de la OMS está situado en el 5 en una escala de 6. "Seguimos en Fase 5", dijo, en referencia al nivel que indica una pandemia inminente.

Ryan insistió en calificar de "inminente" la pandemia por nueva gripe. "En este momento seguiría considerando inminente la pandemia porque hay un contagio de la enfermedad. En esta situación debemos esperar que se alcance la Fase 6, aunque esperemos que no se llegue a ella", dijo.

AISLAMIENTO EN HONG KONG

Mientras, 300 personas, entre ellas cinco españoles, siguen retenidos en un hotel de Hong Kong por orden de las autoridades ante la posibilidad de que alguno de estos 200 huéspedes y 100 trabajadores del hotel Metropark, en el centro de la ciudad, pudieran haber tenido algún tipo de contacto con un joven mexicano, el primer caso de gripe A (H1N1) en China.

El paciente, un mexicano de 25 años, se encuentra estable ingresado en un hospital, pero por precaución el Gobierno de Hong Kong decidió analizar a todas las personas que pudieron estar en contacto con él. El joven llegó a China el pasado jueves con síntomas de gripe y fue entonces ingresado en un hospital.

Una vecina de Barcelona, tres vascos y un tercer español cuyo origen se desconoce se encuentran en el hotel, pero pueden salir de sus habitaciones, indicó el cónsul general de España en Hong Kong, Juan Luis Flores.

El cónsul afirmó que todos los españoles se encuentran "bien" y están "animados y tranquilos", según le comunicaron a través de una conversación telefónica. Los cinco permanecerán aislados junto con los demás huéspedes y trabajadores hasta el 8 de mayo.

El cónsul español añadió que la región de Hong Kong afronta "con tranquilidad" la llegada de la gripe a la región, aunque reconoció la "preocupación normal" de las autoridades.

Sin embargo, varios de los huéspedes del hotel han manifestado quejas por la severidad de la medida adoptada por las autoridades de Hong Kong el viernes por la noche. "Simplemente es surrealista, porque estás atrapado", afirmó una de las huéspedes que llegó desde Singapur el jueves para asistir a la fiesta de cumpleaños de un amigo, Juliet Keys.

Brice Chevallereau, un turista francés, se registró en el hotel el viernes por la tarde, pero no pasó la noche allí. Cuando volvió el sábado, las autoridades le dijeron que tenía que quedarse en cuarentena. "¿Por qué tengo que entrar?", preguntó Chevallereau. "Simplemente estuve dos minutos en el vestíbulo. No es justo", declaró.

Doce de los huéspedes, que se habían negado a quedarse, fueron trasladados a una pensión cercana a la frontera con el resto de China, un lugar ya utilizado para poner en cuarentena a gente de Hong Kong que estuvo expuesta al virus del síndrome respiratorio agudo severo (SARS) en 2003, explicó un portavoz del gobierno de Hong Kong.