Trabajadores chilenos rechazan la flexibilidad laboral y los reemplazos en las huelgas

Santiago de Chile.-  Cerca de 10.000 trabajadores se manifestaron hoy en Chile para rechazar la flexibilidad laboral y la contratación de reemplazos en días de huelga durante la celebración del Primero de Mayo, marcada este año por el progresivo desembarco de la crisis económica en el país.

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(EFE)

Jóvenes huyen de los gases lacrimógenos de la policía durante la jornada de protestas por la celebración del Día Internacional del Trabajador en Santiago (Chile).

"Exigimos el derecho a huelga sin descuelgue, sin reemplazos. Queremos que se elimine definitivamente este abuso empresarial. Esto ocurre solamente en este país", declaró el presidente de la Confederación Unitaria de Trabajadores (CUT), Arturo Martínez.

El dirigente de la organización multisindical, que fue el único orador, criticó las huelgas por reemplazos, que permiten a los empresarios pagar a otros trabajadores mientras sus empleados cumplen un paro, con lo que estos pierden su capacidad de presión.

La manifestación, convocada por la CUT, partió de la Estación Central y transcurrió por la Alameda, la principal arteria de la capital chilena, hasta llegar a la intersección con la avenida Brasil, donde se realizó el acto final.

"La crisis la tienen que pagar los empresarios que ganaron y se enriquecieron", declamó Martínez, un día después de que se conociera que el desempleo en Chile ascendió en el primer trimestre del año al 9,2%, una cifra que se teme que aumente en el transcurso de 2009.

Asimismo, rechazó las medidas de flexibilidad laboral que demandan las patronales, al tiempo que exigió una ley de negociación colectiva que refuerce el papel de los sindicatos, así como un nuevo proyecto de legislación laboral.

Al acto también asistieron los presidentes de la Confederación de Trabajadores del Cobre, Cristian Cuevas; del Colegio de Profesores, Jaime Gajardo; y de la Confederación de Funcionarios de la Salud Municipalizada, Esteban Maturana.

Además, estuvo presente el ex ministro de Trabajo Osvaldo Andrade, quien denunció una "cultura del abuso" en los despidos masivos realizados por las empresas, informó Radio Cooperativa.

En tanto, la presidenta chilena, Michelle Bachelet, participó en un desayuno con empleadas del hogar y reiteró su confianza en que el país está preparado para enfrentar la crisis, al recordar que su Gobierno ha mantenido las ayudas sociales.

Eduardo Frei, candidato presidencial de la Concertación, la coalición gubernamental de centroizquierda, apostó por terminar con la legislación laboral implantada en los años 80, que a su juicio atomiza el movimiento sindical e impide la negociación colectiva.

Su principal oponente, el candidato de la derechista Alianza, Sebastián Piñera, propuso por su parte la creación de un ingreso ético familiar, con ayuda del Estado, de forma que cada familia disponga del dinero que necesita para "vivir con dignidad".

Por otra parte, miembros de la Asociación Nacional de Deudores Habitacionales (Andha), que no se adhirieron a la marcha de la CUT, se enfrentaron con piedras y botellas a Carabineros (Policía militarizada), que respondió con carros lanza-aguas y gases lacrimógenos.

La Policía también detuvo a 23 personas pertenecientes al Movimiento de Pueblos y Trabajadores por querer marchar de forma independiente al recorrido autorizado por la intendencia (gobernación) de Santiago.