Dimite el presidente de la Corte Electoral boliviana siete meses antes de los comicios generales

La Paz.-  El presidente de la Corte Electoral (CNE) de Bolivia, José Luis Exeni, presentó hoy su renuncia "irrevocable", siete meses antes de los comicios generales del próximo 6 de diciembre y con el organismo inmerso en el reto de elaborar un nuevo padrón biométrico.

En una carta remitida al presidente Evo Morales, Exeni esgrime "motivos estrictamente familiares" para dejar un cargo al que accedió el 8 de enero de 2008.

En este periodo ha dirigido la organización de dos referendos inéditos en el país: el revocatorio del 10 de agosto y el constitucional del 25 de enero.

La sorpresiva renuncia de Exeni se produce cuando la CNE afronta las elecciones presidenciales del 6 de diciembre con novedades como un padrón biométrico, la regulación del voto de los bolivianos en el exterior y la configuración de las llamadas "circunscripciones indígenas".

Según el calendario previsto, la CNE tiene cien días para empadronar a unos 3,5 millones de votantes en el nuevo censo, de modo que la administración electoral deberá capturar los datos, huellas digitales, fotos y firmas de una media de 35.000 personas diarias.

Ese padrón costará 35 millones de dólares, de los que 15 millones provendrán de los recursos del Estado y el resto de la cooperación internacional, si bien no todos esos fondos están aún garantizados.

Sin embargo, el ya ex presidente de la CNE aseguró hoy que su dimisión no afectará al calendario y retos previstos para la cita del 6 de diciembre, en la que Evo Morales optará a la reelección.

"No debe haber ninguna duda con respecto a que el órgano electoral va a avanzar de acuerdo al calendario electoral que hemos previsto para el proceso de diciembre", afirmó.

Exeni explicó a los periodistas que su renuncia no está motivada por diferencias con el presidente Morales y que se va con "plena satisfacción" por el trabajo desarrollado en quince meses de "democracia de alta intensidad".

Frente a las constantes acusaciones de la oposición sobre su afinidad al oficialismo, Exeni defendió hoy que su objetivo ha sido el fortalecimiento institucional de la corte desde la "transparencia, imparcialidad, legalidad, autonomía e independencia".

Ese empeño "no ha sido fácil", reconoce en su carta a Morales, cuyos intentos de convocar por decreto el referendo sobre la nueva Constitución por la falta de consenso político frenó Exeni en varias ocasiones en 2008.

Hasta que Morales nombre al sustituto de Exeni, será la vicepresidenta de la CNE, Amalia Oporto, quien asuma de forma interina la presidencia del organismo.

Varios líderes de la oposición reclamaron hoy al presidente boliviano que el sustituto de Exeni sea una persona de "reconocida independencia" para garantizar elecciones "limpias".

En declaraciones a Efe, el presidente del Senado, el opositor Óscar Ortiz, pidió que Bolivia recupere la tradición seguida en otros Gobiernos de nombrar al frente de la administración electoral a una persona de "reconocida independencia, capacidad y eficacia".

A su juicio, una de las "grandes debilidades" de la gestión de Exeni ha sido su "parcialización con el oficialismo".

Ortiz también criticó también su "falta de firmeza" con las "irregularidades" del actual censo electoral.

También coincidió en esas críticas el líder del partido opositor Poder Democrático y Social (Podemos), el ex presidente Jorge Quiroga (2001-2002), quien urgió a reemplazar a Exeni por una persona que goce del consenso, respeto y trayectoria suficiente para devolver la credibilidad al órgano electoral.

Por el momento, el Gobierno de Morales no se ha pronunciado sobre la renuncia de Exeni.

Morales no hizo referencia alguna a este asunto en el discurso que pronunció en La Paz con motivo del Día del Trabajo, en el que anunció la nacionalización de la distribución de combustible al sector aéreo, gestionada hasta ahora por la firma British Petroleum Air (BP-Air).