La crisis reduce el número de autónomos extranjeros un 6,7% en el primer trimestre, según ATA

MADRID.-  La crisis económica está obligando a cerrar muchas empresas y negocios autónomos y los manejados por trabajadores extranjeros no son una excepción. Según datos de la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA), un total de 15.103 inmigrantes se dieron de baja en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) durante el primer trimestre del año, lo que supone una caída del 6,7% respecto a diciembre de 2008.

ampliar foto

EP (EUROPA PRESS)

La crisis económica está obligando a cerrar muchas empresas y negocios autónomos y los manejados por trabajadores extranjeros no son una excepción. Según datos de la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA), un total de 15.103 inmigrantes se dieron de baja en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) durante el primer trimestre del año, lo que supone una caída del 6,7% respecto a diciembre de 2008.

Entre enero y marzo, las bajas al RETA fueron 65.920 y de ellas, el 23% correspondieron a trabajadores extranjeros. Al finalizar marzo, el número de inmigrantes autónomos que permanecían de alta en este régimen ascendía a 209.053, frente a los 224.156 existentes el 31 de diciembre de 2008.

ATA destacó que los trabajadores autónomos extracomunitarios se están acercando "paulatinamente" al de los comunitarios, al acaparar estos últimos el 85,6% de las bajas registradas en el trimestre (12.935).

Las mayores pérdidas de empleo autónomo entre los extranjeros se dieron en Castilla La-Mancha y La Rioja, donde los trabajadores autónomos inmigrantes descendieron un 15,1% y un 12,5%, respectivamente.

Le siguieron Castilla y León y Aragón (ambas con un -10,1%), Cantabria (-9,3%), Comunidad Valenciana (-8,5%), Navarra (-8,3%), Madrid (-8,1%) y Asturias (-7,3%). Por debajo de la caída media nacional (-6,7%) se situaron Murcia (-5,7%), Andalucía (-5,3%), País Vasco (-5,2%), Cataluña (-5,1%), Baleares (-4,4%), Canarias (-3,4%), Extremadura (-3,3%) y Galicia (-2,2%). Por su parte, las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla fueron las únicas que registraron un incremento de autónomos extranjeros, con un repunte del 0,5%.

Según los datos de ATA, el 57,6% de los autónomos extranjeros proceden de la UE, frente al 42,4% que presentan nacionalidades extracomunitarias, un esquema que se repite en la mayoría de las comunidades.

RUMANOS, LOS MÁS NUMEROSOS

Los rumanos representan el 15,5% del total de autónomos extranjeros, seguidos por los emprendedores procedentes de China (11,7%), y de Reino Unido (10,3%). A continuación se sitúan los autónomos procedentes de Alemania (6,9%), Italia (6,3%), Marruecos (6,1%), Francia (4,5%) y Portugal (3,5%).

A pesar de que el colectivo de autónomos rumanos es el más numeroso, ATA advierte en su informe de que ha sido el colectivo más castigado por la pérdida de emprendedores extranjeros, al haber reducido su número de autónomos un 22,3%, seguido muy de lejos por los ecuatorianos (-9,5%). Por el contrario, los autónomos procedentes de China registraron un aumento del 2,3%, lo que se traduce en 543 autónomos chinos más desde principio de año.

La construcción ha sido el sector que se ha llevado la peor parte, con un descenso del 10,5% en el número de emprendedores extranjeros, hasta sumar 50.022 a cierre del primer trimestre. Prácticamente todos los sectores han registrado caídas en el número de inmigrantes autónomos, salvo información y comunicación (+1,8%), hostelería (+0,6%) y actividades sanitarias (+0,1%).

Los extranjeros cotizantes al RETA representan el 11,7% sobre el total de afiliados a la Seguridad Social, el mismo porcentaje que está afiliado al Régimen Agrario. La mayor parte de los inmigrantes están en alta en el Régimen General (67,5%), mientras que el Régimen del Hogar aglutina un 9,3%, el del Mar un 0,3% y el del Carbón un 0,03%.

El presidente de ATA, Lorenzo Amor, señaló que todos estos datos exigen un mayor nivel de compromiso con el empleo y una apuesta "decidida" por el autoempleo a través de medidas que fomenten la contratación, con un mayor y mejor acceso a la financiación y con estímulos fiscales.